Ante el "problema" de la inmigración, a los políticos de media Europa se les ha ocurrido una idea genial: obligar a los inmigrante a firmar un contrato de integración donde demuestren sus conocimientos del idioma, del país y su integración en el mismo. Realmente, esto sólo es una medida más para adoctrinar y manipular a los inmigrantes. Al menos, aquí en Valencia.
Hace un par de semanas se presentaba aquí un manual dirigido a los inmigrantes, con el que "usted conocerá nuestras leyes, costumbres (...) nuestra historia...". El manual está prologado por Francisco Camps, presidente de la Generalitat y por Rafael Blasco, conseller de Solidaridad y Ciudadanía (menuda solidaridad y ciudadanía la de este tipo). Dicho manual ha sido editado por la consellería de Solidaridad y Ciudadanía como una "útil herramienta que le ayudará en su proceso de integración". Lo realmente despreciable, sin embargo, viene ahora, con la manipulación histórica, más propia de Pío Moa que de un manual de Historia.
La historia de la Comunidad Valenciana que conocerán los inmigrantes en las catorce páginas de recorrido desde la prehistoria hasta la actualidad ofrece una visión bastante dulcificada del franquismo, al que en ese apartado ni siquiera se califica como dictadura, si bien en el capítulo sobre historia de España se habla una vez de "régimen dictatorial". "De 1939 a 1975 se instaura un período conocido como Franquismo", explica el texto.
Por contra, el retrato de la II República resulta tan escueto como sanguinario. En los diecinueve centímetros cuadrados que ocupa la foto de cinco líneas sobre el "lustro republicano" se habla de "quema de edificios religiosos y asesinatos, especialmente durante el año 1936". "Culminaron con la guerra civil española", continúa, sin hacer la más mínima referencia al alzamiento golpista del 18 de julio. La fotografía que se ofrece del complejo de la Ciudad de las Artes ocupa siete veces más espacio.
La Guerra Civil se liquida en cinco renglones y del franquismo se dice que pasó "por diversas etapas, una larga de hambre conocida como posguerra, otra de apertura internacional, la más importante de desarrollo económico y, finalmente, el tardofranquismo, en el que existieron numerosas movilizaciones para ampliar las libertades políticas". ¿Ampliar las libertades políticas? ¿Acaso durante el franquismo había algún tipo de libertad política?
Resulta también sorprendente, además del contenido, que el siglo XX se liquide en apenas nueve párrafos. No se valencianiza la Transición -salvo Milans del Bosch en el 23 de febrero, después de referirse a ETA y los Grapo- y se cita de forma aséptica a los presidentes de la Generalitat Joan Lerma, Eduardo Zaplana, José Luis Olivas y Francisco Camps. El texto no alude a los presidentes del Consell preautonómico, Enrique Monsonís y Josep Lluís Albiñana.
martes, 9 de febrero de 2010
Adoctrinando a los inmigrantes
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2 comentarios:
Yo he pasado por un curso de integración aquí en Alemania (aunque al ser de la UE no estaba obligado, sin embargo me vino bien por el asunto del idioma) y por lo que veo en España esto también lo están toricendo, retorciendo y destrozando. Europa empieza en los Pirineos, va a ser verdad...
Es lógico. Aquí se politiza todo y los políticos son expertos en retorcer. Es la desgracia que teemos en España.
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