martes, 28 de octubre de 2008

El que esté libre de pecado...

Hace unos días hubo una polémica porque Ernest Benach, presidente del parlamento catalán, se había gastado 83.386 euros en un coche y 9.276 euros en extras. Es criticable, por supuesto. Pero en política hay una frese que encaja a la perfección: "El que esté libre de pecado, que tire la primera piedra".
Podríamos empezar por la cantidad de coches oficiales que pululan por toda España y el gasto que suponen sean tuneados o no.
Pero me apetece más hablar de casos de la Comunidad Valenciana, ya que son los que más conozco (y si queréis, vosotros podéis comentar los de vuestra comunidad).

Por un lado, tenemos a Carlos Fabra, presidente de la Diputación de Castellón (sí, amigos de Castellón, voy a volver a hablar de Fabra). La Diputación de esa provincia se ha gastado 84.840 euros en 1.500 corbatas para hombre (exclusivas, de seda, de siete pliegues) y 500 pashminas para mujeres. Son regalos corporativos para los VIP de la administración y los más allegados. Después, claro, no llega para gastarse 75.000 euros en 26 proyectos de implantación de energías renovables.

Por otro lado, los presupuestos para 2009 de Les Corts prevén la subida del sueldo a los parlamentarios (2%) y un gasto en vehículos de 850.000 euros. Se aprobó con los votos del PP y Compromís y el voto en contra del PSPV. Sin embargo, este presupuesto será retirado y rehecho para congelar los sueldos de los diputados. Como siempre, gastando el doble cuando se podía hacer bien de un principio.

Pues eso, que gaastos superfluos hacen todos los políticos. Lástima que las únicas noticias que saltan a la palestra son las que se producen en las dos capitales del reino, Madrisd y Barcelona.

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