Retrato de Sarah Palin

Sarah Palin, una heroína para muchos derechistas españoles, es una de esas personas que se autorretratan cada vez que abre la boca. Ya lo hemos podido comprobar otras veces.

Así por ejemplo, cuando Palin fue alcaldesa de Wasilla (Alaska), la tipa presentó como una de sus primeras medidas "limpiar la biblioteca de libros que subvierten la mente". En su particular Índice de Libros Prohibidos se encontraban: El mercader de Venecia, de William Shakespeare; El guardián entre el centeno, de J D Salinger; Al este del Edén, de John Steinbeck (también Las uvas de la ira y De ratones y hombres); Huckelberry Finn, de Mark Twain; El color púrpura, de Alice Walter; algunos de los libros de la saga de Harry Potter, de J K Rowling; El Decamerón, de Bocaccio; El origen de las especies, de Charles Darwin; La naranja mecánica, de Anthony Burgess; Mientras agonizo, de William Faulkner; Un mundo feliz, de Aldous Huxler; varios libros de Stephen King (concretamente Carrie, Christine, Cujo y El resplandor); Un puente hacia Terabithia, de Katherine Paterson; Los cuentos de Canterbury, de Geoffrey Chaucer; Confesiones, de Jean-Jacques Rousseau; Muerte de un viajante, de Arthur Miller; Flores para Algernon, de David Keyes; James y el melocotón gigante, de Roal Dahl; Caperucita roja, de los hermanos Grimm; El señor de las moscas; de William Golding; Lisístrata, de Aristófanes; Escalofríos, de Dean Koontz; Alguien voló sobre el nido del cuco, de Ken Kesey; Cien años de soledad, de Gabriel García Márquez; El príncipe de las mareas, de Pat Conroy; Matadero cinco, de Kurt Vonnegut Jr.; Tarzán de los monos, de Edgar Rice Burroughs...
La lista es más amplia, pero he querido señalar aquí los más conocidos (y que conste que la lista no se limita sólo a las novelas). Además, la bibliotecaria se negó a secundar las órdenes, por lo que fue despedida.

También ha opinado sobre la situación mundial actual. Según ella, estamos viviendo una "nueva guerra mundial". Y el enemigo esta vez es "el terror" (no, no se refiere a las novelas de Stephen King que intentó censurar, sino al terrorismo). Además, según ella, "nuestros líderes envían a nuestros hijos a la guerra por voluntad de Dios".

Sobre la homosexualidad y la educación sexual, Sarah Palin ha llegado a declarar que "Los homosexuales deben ser transformados en heterosexuales a través de la oración a Dios, y la educación sexual en las escuelas debe ser abolida".

Y como buena derechista, el medio ambiente no le preocupa. Suya es la propuesta para organizar safaris para abatir osos polares desde helicópteros. Además, en su pueblo, cada habitante recibe dos mil dólares al año de Chevron y BP, compañías que vierten basura en el mar.