miércoles, 13 de enero de 2010

Insultos en el fútbol

Hace unas semanas jugaron en equipo del Osasuna contra el Real Madrid en Pamplona. Entre ambas aficiones no existe mucho buen rollito. Ese día no fue una excepción. Hubo insultos, en especial contra Cristiano Ronaldo.
Al día siguiente, el sectarismo ciego de la prensa deportiva española, tan madridista ella, hablaba del infierno navarro. El informativo deportivo de Cuatro (que tanto empieza a parecerse a un programa del corazón), presentado por los inefables Manolos o por el no menos inefable Nico Abad, le dedicaba casi cinco minutos a los insultos proferidos contra los jugadores madridistas. En el programa Punto pelota, de Intereconomía, se debatía el asunto bajo el título ¿Se deben tolerar los insultos contra Cristiano Ronaldo?, y había quién ponía como ejemplo de comportamiento a la afición madridista (sí, la misma que tolera a los Ultrassur).
Todas las aficiones, repito, TODAS las aficiones gritan insultos contra los rivales. Está a la orden del día. Uno va a un campo de fútbol a desahogarse. Yo mismo, he ido alguna vez a algún campo de fútbol y he acabado gritando insultos. Eso es normal. No voy a justificarlo, pero el fanatismo ciego de seguir a un equipo y el calentón del momento (más si tú equipo va perdiendo) lleva a estas cosas.
¿Se deben tolerar los insultos, en general, en el fútbol? Hasta cierto punto. Llamar desgraciado o hijo de puta a un jugador no es lo mismo que llamar puto negrata a un jugador negro. Yo creo que mientras el límite sea el insulto y no se llegue al insulto racista o a las agresiones (como lanzar objetos al campo, impacte o no en alguien), los insultos son algo inofensivo. Y lo demás son sólo exageraciones de la prensa sensacionalista y madridista de España.

2 comentarios:

Mikel Huerga dijo...

Hola Kurtz!

No coincido contigo esta vez... ya conoces mi "peculiar" amor por el futbol (vamos, que no lo aguanto lo mire por donde lo mire) y los insultos son una de las cosas que contribuyen a que el futbol, tenga a mis ojos la visión que tiene.

Un futbolista cobra demasiado. Es un dato objetivo. Pero yo creo que en su "sueldo" no incluye tener que oir insultos de otras personas. Y cuando digo insultos, me refiero a todo tipo de insultos, desde los racistas, xenófobos, hasta el mero "gilipollas". Para mí, todos los insultos sobran.

Saludos!

Kurtz dijo...

Tampoco a mí me gusta el fútbol (las pocas veces que he ido es porque me han invitado), pero hago esa distinción entre los insultos racistas y los insultos "cotidianos". Además, cuando hay jugadores como Cristiano Ronaldo que afirman que le encanta que le odien, no se puede esperar otra cosa que recibir insultos.
Saludos.