jueves, 12 de mayo de 2011

Nuevo hospital La Fe: ejemplo de la Sanidad valenciana

Tienen razón los gobernantes valencianos cuando dicen que el nuevo hospital La Fe de Valencia es un ejemplo de cómo funciona la sanidad valenciana:

-El hospital acumula ya un año y medio de lista de espera en cirugía infantil. Y eso que el nuevo hospital La Fe es "uno de los más grandes de Europa" (aunque se han reducido el número de camas. Estaz lista de espera está provocando que los pacientes infantiles sean derivados al hospital de Manises, gestionado por UTE Ribera y Sanitas, lo que cuesta dinero a las arcas públicas porque es como si derivara a los pacientes a un hospital privado.

-Las camas no caben por las puertas. En las habitaciones de aislamiento, las camas no pueden salir con las barandillas subidas o con los monitores de control. Las camas de Cuidados Intensivos por la puerta de la Sala de Resonancias.

-No existe servicio de mantenimiento por la noche. También se ha suprimido el grupo de diez trabajadores que cubrían las bajas.

-Las muestras de anatomía patológica se han trasladado a la sala de autopsias, que está sin terminar, igual que los laboratorios. Además, como el laboratorio está en obra, se ha tenido que habilitar una flota de ambulancias que trasladen las muestras al antiguo hospital La Fe, donde son analizadas.

-Niños y adultos están mezclados. Mientras esperan, los niños pueden contemplar el espectáculo de entrada de pacientes en Urgencias, pacientes que pueden ir desde ensangrentados heridos de accidentes de tráfico hasta gente esposada. Ya han sido varios los padres que han presentado denuncias por ésto, aunque la consellería niega que existan tales denuncias.

-El techo se sigue cayendo. Ya se derrumbó parte de un falso techo en la zona de quirófanos. No ha sido el único sitio. También en uno de los boxes de neonatos se cayó una junta del techo. Por suerte, no hubo que lamentar daños personales. La grieta fue tapada con un precinto.

-Una bomba de aire acondicionado reventó afectando a este servicio.

-Los médicos se quejan de que hay consultas tan pequeñas que la exploración de los pacientes es dificultosa y tienen que dejar sus pertenencias fuera de la consulta.

-El helipuerto del nuevo hospital no funciona y los helicópteros no pueden aterrizar. La razón es que está dentro de la ruta aérea de los aviones que aterrizan en Manises. Concretamente, se encuentra perpendicular a la ruta de los aviones, por lo que Aena no puede permitirlo.

-El personal del nuevo hospital no puede apagar la luz de los pasillos porque no hay interruptores. Así pues, las luces permanecen encendidas toda la noche.

-Para ocultar que el hospital todavía está en obras y que una de sus fachadas (la de los laboratorios) está abierta, se colocó una gran lona.



-Recientemente se privatizó el servicio de esterilización del material médico. Según las denuncias de los empleados del nuevo hospital, los empleados del servicio de esterilización no saben realizar su trabajo. Punzones con restos de huesos, pinzas manchadas de sangre o quemadas, contenedores sucios (con el filtro caído y sin el paño verde) o sin precintar o mal rotulados, cajas con material duplicado (lo que provoca que en otras cajas no haya material)...

-Los vecinos del antiguo hospital piden que se recupere los usos sanitarios de este complejo. De momento, allí sólo funciona en Centro de Investigación, los laboratorios y los servicios de Oncología Radioterápica y Medicina Nuclear (éstos dos últimos, a la espera de conseguir el permiso del Consejo Internacional de Seguridad Nuclear para trasladarse al nuevo hospital). El resto del complejo permanece abandonado, sólo vigilado por algunos guardas en el exterior. Durante el traslado, fue tal el caos, que se produjeron robos de material. Hoy día, se habla de okupas e indigentes ocupando las plantas vacías. Los vecinos piden reabrir el hospital para que los barrios de los alrededores no pierdan la fuente de ingresos que daba vida (principalmente en bares, cafeterías y floristerías).

Efectivamente, todo un ejemplo de la Sanidad valenciana.

2 comentarios:

Jorge Arbenz dijo...

Lo que importa de verdad es el negocio, no hay que engañarse: a más servicios privatizados, más empresitas y concesiones para los amigos.

Kurtz dijo...

Desgraciadamente así es; tienes mucha razón. Y así nos va.