Desde el principio, he criticado abiertamente la forma en que en España se nos ha introducido la TDT. Las supuestas ventajas tecnológicas se diluyeron ante la enésima chapuza. Y es que, en este país no somos capaces de hacer algo sin hacerlo de forma chapucera.
El reparto de canales ha sido un desastre. No vamos a hablar de ese reparto que ha favorecido a la derecha y a la ultraderecha mediática (en Valencia, incluso, el gran favorecido fue un empresario implicado en la trama Gürtel).
Pero ese reparto tan mal hecho (durante la época de Zapatero, quien algún palo se tendrá que llevar por esto; no solo Rajoy es el culpable) dará su último coletazo el 6 de mayo con el cierre de nueve canales. De esos canales, hay dos cuya marcha provocará que tengamos una TDT más pobre aún: Xplora y La Sexta 3. El primero era un buen canal dedicado a documentales y el segundo fue el primer canal enteramente dedicado a emitir películas y cine. Esta claro que la originalidad y la cultura en este país empiezan a importar más bien poco. Que desaparezca La Sexta 3, pero no lo hagan Telecinco y Cuatro (auténticos exponentes de la telebasura) o 13TV (exponente de la manipulación y la mierda informativa), demuestra que España está recorriendo un camino televisivo muy negro.
El 6 de mayo, estos dos canales desaparecerán. Al final, resultará que acabaremos con los mismos canales que teníamos antes de la TDT. Y para este viaje no necesitábamos estas alforjas.
Petición para evitar el cierre de los canales afectados.
Vídeo de Atresmedia contra el cierre de sus canales.
Vídeo de Mediaset contra el cierre de sus canales.
lunes, 28 de abril de 2014
Una televisión menos atractiva
Firmado por Kurtz a las 23:47 0 voces
Categoría: Televisión
domingo, 13 de abril de 2014
Crónicas vampíricas
Crónicas vampíricas es una serie en la que dos hermanos vampiros, uno bueno y otro malo, se enamoran de una adolescente, idéntica a la mujer que los convirtió en vampiros.
Estamos ante un tema recurrente últimamente en la literatura, el cine y la televisión: los vampiros. Sin embargo, los vampiros de Crónicas vampíricas son vampiros de verdad, no como los famosos de Crepúsculo. De hecho, Crónicas vampíricas tiene más en común con True blood, aunque también guarda las distancias con respecto a ésta.
Crónicas vampíricas es una serie que va cogiendo interés capítulo a capítulo, temporada a temporada, con lo cual merece la pena darle una oportunidad.
Firmado por Kurtz a las 13:22 0 voces
Categoría: Televisión
sábado, 12 de abril de 2014
Fringe
Fringe es otra de las creaciones de J J Abrams. La serie, que duró cinco temporadas, muestra toda una serie de sucesos extraños a los que los protagonistas se enfrentan utilizando la ciencia. Con tintes de Expediente X, pero yendo un paso más allá, la calidad de esta serie resulta excepcional. Las tramas están cargadas de imaginación (los mundos paralelos son lo mejor de esta serie, sin duda). Su trío protagonista (Anna Torv, Joshua Jackson y, sobre todo, John Noble) hacen unas interpretaciones magníficas.
Fringe (que en España llevó el subtítulo de Al límite) es una digna heredera de Perdidos, también obra de Abrams. Una serie que los amantes de la ciencia ficción y los misterios imposibles sabrán apreciar, sin duda.
Firmado por Kurtz a las 15:06 2 voces
Categoría: Televisión
martes, 8 de abril de 2014
Habitantes de la caverna
Hace tiempo que dejé de ver los debates políticos que se organizan en televisión. En parte porque desvirtúan la palabra "debate". Los últimos que veía eran Al rojo vivo y La Sexta noche, ambos de La Sexta, y ambos los dejé de ver por la misma razón: sus tertulianos más conservadores. No es que esté en contra de un debate en el que se defiendan distintas posturas ideológicas; no soy un protocomunista puro. Lo que pasa es que no entiendo a ciertas personas que, en lugar de debatir, se dedican al insulto permanente y constante. El último caso se dio este sábado cuando Alfonso Rojo insultó a Ada Colau, llamándola gordita. No es el único ejemplo de Rojo (al que debe producirle urticaria su propio apellido); son famosos sus enfrentamientos con Pablo Iglesias (no, no confundir con el fundador del PSOE) al que en cierta ocasión llegó a llamar chorizo y, en otra, le recomendó que se duchara. No es el único tertuliano de los programas de La Sexta al que no puedo soportar por su actitud. Otro ejemplo es el de Eduardo Inda, endiosado y soberbio que se cree el inventor del periodismo de investigación y el único poseedor de la verdad y la razón. Y quizá el caso más conocido sea el de Francisco Marhuenda, al que algún día le dará un berrinche cuando se meten con su adorado Gobierno y su no menos adorado Mariano Rajoy, su gran amor platónico. Marhuenda es otro que muestra una actitud de desprecio hacia los demás. Si uno se fija en La Sexta noche podrá apreciar cómo Marhuenda se ríe por lo bajo cuando alguien habla (eso por no hablar de su manía de interrumpir con monosílabos mientras alguien trata de argumentar algo).
Lo peor es que esta gente encuentra apoyo entre compañeros de profesión e ideología. Gente como Jiménez Losantos, Hermann Terstch (otro que se ha apuntado a defender a Rojo en su affaire con Colau) o el baboso y polemista Salvador Sostres (quien ha defendido a Rojo insultando a Colau y llamándola gorda).
En este país, la palabra "debate" está muy devaluada. No hay más que ver las sesiones del Congreso de los Diputados, o de cualquier parlamento autonómico de España. Quizá por eso estos personajes tienen tanto éxito y tantos seguidores. Y eso resulta muy triste. Al final, la televisión solo da lo que el público quiere, y solo refleja lo que la sociedad es.
Como decía al principio, no estoy en contra de que la gente con diferentes visiones ideológicas debatan en televisión. De lo que estoy en contra es de tristes espectáculos de insultos. No hay gente que sepa razonar y debatir sin necesidad de recurrir al insulto en las filas conservadores de este país. Empiezo a entender porqué a la derecha mediática se la llama "caverna".
Firmado por Kurtz a las 22:59 3 voces
Categoría: Periodismo
domingo, 6 de abril de 2014
Utopía
Leí hace tiempo Utopía, de Tomás Moro, y he de decir que es uno de los libros que más impacto me ha producido. En este libro, Moro describe lo que considera una sociedad perfecta, tanto política como socialmente, encuadrada dentro de una región ficticia.
La cuestión que me dejó planteada el libro es si una sociedad así podría existir algún día; si podemos tender hacia ello a pesar de los obstáculos que vivimos hoy día. A pesar de mi pesimismo patológico, quiero pensar que sí, que las utopías de hoy son las realidades de mañana.
Firmado por Kurtz a las 13:44 0 voces
Categoría: Literatura
sábado, 5 de abril de 2014
No tengo miedo
Durante el caluroso verano de 1978, un niño descubre, cerca del pueblo en el que vive un terrible secreto que le revelará la oscuridad que esconden muchos adultos.
Hace ya tiempo que leí la novela No tengo miedo, de Niccolò Ammaniti, en la que se basa esta película. La novela resultaba bastante agobiante, casi como el ambiente que describe su autor. La película, sin llegar al nivel de la novela (eso sucede pocas veces, como bien se sabe), mantiene el nivel y la intriga. Destaca principalmente la interpretación de los niños protagonistas y la recreación, que ayuda a crear el mismo ambiente asfixiante de la novela. Todo en esta historia resulta asfixiante, desde el calor hasta los secretos.