miércoles, 19 de marzo de 2014

Ídolos de la izquierda pura

Artur Mas convoca un referéndum secesionista para decidir la separación de Cataluña de España y de repente se convierte en el ídolo de grandes revolucionarios de ordenador, revolucionarios de izquierda pura y berdadera hizquierda. ¿Qué ha hecho Mas para semejante honor? Simplemente enfrentarse a la "fascista España". Lo mismo ha pasado con unos cuantos dictadores del norte de África y Oriente Medio, convertidos en ídolos del verdadero izquierdismo solo porque su países han sido arrasado por las bombas del "imperialismo americano". El último caso de estos ídolos con pies de barro nos lo regala la crisis de Ucrania, y por partida doble. Víktor Yanukóvich es desalojado del poder por un golpe de Estado fascista y, de golpe y porrazo, la izquierda lo eleva al altar de los ídolos. Pronto se cantarán sus alabanzas, casi como si fuera Marx reencarnado. Lo mismo ha pasado con Vladimir Putin, el presidente de Rusia, quien al anexionarse Rusia, puede ver cómo la izquierda se rinde a sus pies, y olvida su autoritarismo, sus contactos mafiosos o su homofobia. Se me llamará tibio, pero si tuviera que elegir entre unos fascistas y unos mafiosos para gobernarme, elegiría cualquier otra cosa.
También me mola esa costumbre de ver conspiraciones que, generalmente, tienen la oscura mano de Estados Unidos detrás. Ya sea un golpe de Estado o la desaparición misteriosa de un avión comercial. Detrás de todo lo malo que sucede ahí está el país de las barras y las estrellas. Y todo ello apoyado por falta de pruebas (simplemente hay que afirmarlo o bien quién sale favorecido) o indicios vagos. Volviendo a Ucrania, ¿y si el golpe de Estado hubiera sido urdido por Rusia para forzar la reanexión de Crimea? ¿En qué me baso? En nada, simplemente en que Putin es quien más favorecido ha salido de todo el asunto de Ucrania. Es así como se piensa para ser un revolucionario de la izquierda pura y de la berdadera hizquierda.

lunes, 17 de marzo de 2014

Cuestión de responsabilidades

El viernes estaba viendo un reportaje sobre José María del Nido, expresidente del Sevilla FC, encarcelado por corrupción. Lo que me sorprendió de aquel reportaje no fue cómo Del Nido movía los hilos de la corrupción en Marbella (durante años sinónimo de corrupción política) ni su pasado fascista (con brutales agresiones incluidas); lo que me sorprendió fue que había gente, y no solo presidentes de clubes de fútbol, dispuesta a defenderlo. Gente de la calle que decía que Del Nido era "inocente" y que "él ha hecho muy buen trabajo, lo único que pasa es que le ha pagado mucho".
Realmente, estas actitudes no son nuevas y ya ni sorprenden. Lo hemos visto muchas veces: Francisco Camps, Carlos Fabra, Isabel Pantoja, Lionel Messi...
También existe ese hooliganismo, alimentado por el bipartidismo, de que "mis corruptos son mejores que los tuyos porque en tu partido sois más corruptos". Recientemente lo hemos visto con el caso de los ERE. Mientras unos ven persecución y oportunismo en la instrucción de la jueza Alaya, no ven esa persecución y oportunismo en la instrucción del caso Gürtel, por ejemplo. Y lo mismo al contrario. Según el partido que sea perseguido, la actitud de mucha gente con la corrupción varía.
En la corrupción política existen los responsables directos: los que roban. Pero también existe una responsabilidad en la gente que los mantiene con sus votos y los justifica. En la Comunidad Valenciana, Francisco Camps salió reelegido en 2007 (a pesar de los primeros escándalos y de sucesos tan graves como el accidente de metro de 2006). En 2011 volvió a salir reelegido a pesar de que estaba formalmente imputado. Algo similar sucedía en Castellón, donde el PP era votado masivamente a pesar de los escándalos de corrupción que implicaban (e imputaban) a Carlos Fabra.
Lo he dicho otras veces y sigo pensándolo: En este país la democracia representativa no funciona. Y una de las razones (otro día podemos hablar del sistema o de cómo se hizo la Transición...), es que la sociedad española no tiene una adecuada educación e información política. No me refiero a educación que obligue a votar a un partido u otro (porque entonces estaríamos en una dictadura a las claras). Me refiero a una educación que enseñe a los ciudadanos, de forma totalmente neutral, qué persiguen las diferentes ideologías, así como el funcionamiento de los partidos y, más importante porque nos afecta directamente, cómo funcionan las administraciones públicas. Así se evitarían argumentos hechos desde la ignorancia tales como "él ha hecho muy buen trabajo, lo único que pasa es que le han pagado mucho".

domingo, 9 de marzo de 2014

La peste



La peste, de Albert Camus, es una de las grandes obras de la literatura francesa y mundial. Ambientada en la ciudad argelina de Orán, durante una plaga de peste que asola la ciudad, nos presenta como diferentes personajes se enfrentan a dicha plaga. Médicos, turistas, habitantes de la ciudad o fugitivos son los personajes que sacarán diferentes enseñanzas sobre el ser humano a partir de su experiencia. La obra sirve, además, para mostrar y desarrollar el punto de vista filosófico del autor.
En definitiva, La peste es uno de esos libros que todos deberíamos leer antes de morir, al menos una vez.

sábado, 8 de marzo de 2014

Primera plana



En la Chicago de 1929, un grupo de periodistas espera saber si un preso que va a ser ejecutado por el asesinato de un policía va a ser indultado o finalmente ejecutado. Entre ellos se encuentra un periodista de sucesos que quiere dejar el trabajo y casarse, algo a lo que su jefe se opone.
Primera plana es una buena comedia, dirigida por Billy Wilder y protagonizada por Jack Lemmon, Walter Matthau y Susan Sarandon. Una sátira, como muchas de las que hizo Wilder, en este caso sobre el periodismo y su influencia en la sociedad.
En definitiva, estamos ante una película divertida con la que pasar un buen rato.

jueves, 6 de marzo de 2014

El PSOE, partido pretendidamente de izquierdas, sigue apuntalando a la derecha en Navarra

Tras las elecciones de 2007, UPN perdió la mayoría absoluta de la que había venido disfrutando los años anteriores. Aquello abrió la posibilidad a un pacto entre los nacionalistas de NaBai y los socialistas del PSN-PSOE para gobernar la comunidad. UPN hizo guiños hacia el PSOE para no perder el Gobierno, lo que provocó que el PP se desligará de ellos, bajo cuysas siglas se había presentado electoralmente hasta entonces. En el PSN preferían la opción de NaBai, pero el PSOE de Zapatero y Blanco se negaron a ello. Esto provocó una crisis en el partido socialista navarro, con dimisiones en las ejecutivas del PSN y de las Juventudes Socialistas de Navarra. La agresiva campaña de la derecha ("Zapatero vende Navarra a los separatistas vascos") y las duras críticas que había recibido el tripartito catalán hacía que los socialistas no quisieran estar demasiado cerca de aquello que oliese a nacionalismo (más aún si era nacionalismo radical del norte).
Estos días la historia parece estar repitiéndose en Navarra. Tras descubrirse que la vicepresidenta del Gobierno navarro intentó injerencias en la Hacienda foral, se planteó la posibilidad de una moción de censura contra el Gobierno navarro. El problema es que esa moción de censura debería contar, para salir adelante, con el apoyo de Bildu, partido que, a pesar de ser legal, muchos sigue viendo como una extensión de la ETA que solo existe en sus cabezas. Y aquí es donde han saltado todas las alarmas. Desde el PP son lógicas esas alarmas, porque no se puede esperar otra cosa de ellos. Pero el PSOE repite el mismo error que en 2007. El PSOE de Elena Valenciano y Rubalcaba sigue la misma línea de Zapatero y Blanco y se oponen y prohíben que haya moción (menuda regeneración está haciendo el PSOE). Claramente estamos ante otro error por su corta mira. El PSOE, que pretende hacerse pasar un partido de izquierdas, simplemente demuestra que está más preocupado por sostener a la derecha y al bipartidismo. Y eso es triste y lamentable. Quizá la próxima debacle en Navarra les haga reaccionar y se den cuenta que están perdiendo a los votantes de izquierda en esa comunidad y en el resto de España. Y si el PSN quiere recuperarse en Navarra debería deshacerse del lastre que le supone el PSOE.
Espero que lo de Navarra no se repita en otras comunidades en las que la derecha lleva años gobernando y que necesitan desesperadamente un cambio de rumbo político. Aunque bien pensado, el cambio que necesita este país es que PP y PSOE se transformen en partidos residuales.

lunes, 3 de marzo de 2014

FGV y la lección no aprendida del accidente de metro

El 3 de julio de 2006 se produjo el que es el peor accidente de metro que ha ocurrido en España. A nivel europeo es el cuarto peor (primero si contamos desde los años 70 del pasado siglo); y el quinto peor a nivel mundial. Cualquiera podría pensar que después de un hecho tan trágico se tomarías medidas para que no volviese a ocurrir (de las dimisiones de los responsables, mejor ni hablamos). Pero eso no es de esperar en Valencia, y menos en una empresa como FGV, que supura corrupción e irregularidades.
Ferrocarrils de la Generalitat Valenciana (FGV) sigue con el mismo comportamiento anterior al terrible accidente de 2006, es decir, un comportamiento dominado por la ocultación, la opacidad y falta de inversión en seguridad (a pesar de las promesas que, en su día, hizo el todavía conseller José Ramón García Antón).
Después del accidente del 3 de julio de 2006 (que vino precedido por el choque de tres convoyes en Picanya en septiembre de 2005) se produjeron otros descarrilamiento bastante graves, aunque sin víctimas mortales, como el de 2007 en Benaguasil, o el de 2008 en la estación de Canterería, donde una unidad anduvo doscientos metros descarrilada hasta que chocó con el andén de la estación. Pero donde más se está viendo la falta de seguridad de las líneas ferroviarias gestionadas por FGV es en Alicante.



Esta noticia se publicaba hace unos días. En ella, se habla de los pasajeros de la Línea 9 del TRAM que une Benidorm con Dénia, los cuales se encontraron tirados durante más de una hora en el apeadero de L'Albir después de que el convoy en el que viajaban sufriera una avería.



(Imagen tomada por un pasajero desde el apeadero de L'Albir.)


En poco más de quince días han ocurrido varias incidencias como la avería del 10 de febrero que hizo que los pasajeros quedaran atrapados entre Benissa y Calp unas cinco horas. Días después una avería llenaba de humo el tren. Días después, en Teulada volvió a averiarse. El mes de febrero se cerraba con la avería ya citada en L'Albir.



(Imagen tomada por un pasajero del interior del tren en Benissa.)


Los trenes no son los únicos elementos de inseguridad. El pasado día 28 de febrero, la consellera Isabel Bonig inauguraba, junto a miembros de FGV y políticos del pueblo, la sala de la estación de Teulada. Mientras tanto, en Benidorm, los trenes tenían problemas en el paso a nivel de la carretera de entrada a la ciudad. Está claro, y más ahora que se acercan elecciones europeas, que a FGV y a la consellería lo que más les importa es inaugurar cosas (a veces inconclusas) y no dotar de más seguridad las propias infraestructuras y el servicio que ofrecen. Los pasos a nivel también son fuente de conflicto en esta línea. El pasado día 12 de febrero, en el paso a nivel de la avenida Joan Fuster con camí de Sant Joan, en Dénia, un camión de reparto de bebida embistió una barrera, arrancándola, y sin que el conductor se percatara de lo sucedido. Días antes, en Dénia y otros municipios de la comarca, varias barreras fueron arrancadas por el viento. En La Xara también se encontró una barrera en el suelo, aunque no se ha explicado el por qué cayó.
Ante esta situación, los pasajeros empiezan a hartarse, pero temen reclamar. La Generalitat está esperando cualquier cosa para cerrar esta línea, y los pasajeros no quieren perder una línea que une Alicante, Dénia y Benidorm, y que utilizan fundamentalmente para ir al trabajo. Incluso se ha llegado a pedir firmas en Internet para que esta línea no desaparezca. De momento, el Gobierno valenciano ha prometido que no cerrará la línea, pero ya sabemos lo que vale una promesa de nadie del PP.
Los pasos a nivel, que comentaba anteriormente, también son fuente de conflicto en esta línea. El pasado día 12 de febrero, en el paso a nivel de la avenida Joan Fuster con camí de Sant Joan, en Dénia, un camión de reparto de bebida embistió una barrera, arrancándola, y sin que el conductor se percatara de lo sucedido. Días antes, en Dénia y otros municipios de la comarca, varias barreras fueron arrancadas por el viento. En La Xara también se encontró una barrera en el suelo, aunque no se ha explicado el por qué cayó.
Desde FGV se reconoce que la principal causa de averías en esta línea es el atropello de jabalíes, sobretodo en el tramo entre Teulada y Calp. A pesar de ello (¿explica el atropello de jabalíes el gran número de averías?), y ante las dudas que plantea la Oposición política (el PSPV ha llegado a dudar de que la Línea sea segura) se insiste en que la línea es cien por cien segura (algo que también se decía de la Línea 1 del metro de Valencia, en la que se produjo el accidente de 2006). Los problemas de averías no deberían buscarse en la naturaleza, tal como se señala desde otros puntos de vista, sino en los propios trenes e infraestructuras. En octubre del año pasado, FGV tuvo que declarar desierto el concurso de mejoras en esta línea. Curioso que se convocara un concurso de mejoras si los trenes son cien por cien seguros (excepto, al parecer, si se cruzan con un jabalí).
En realidad, desde el 2003 se vienen produciendo accidentes (la empresa los califica de "incidentes", simplemente porque no se registran víctimas mortales) continuados en esta línea. El de esta imagen se produjo en 2008, en Calp.


De este accidente se echo la culpa al maquinista. Es una práctica habitual en la empresa. Incluso han sido despedidos maquinistas por accidentes en los que no se comprueba el estado de los trenes o de la infraestructura. A pesar de que se han realizado algunas actuaciones sobre las infraestructuras, los accidentes han seguido ocurriendo. El 16 de junio de 2010, un tren descarriló a la altura de Altea, sin provocar heridos graves, pero provocando el corte de la línea durante siete horas.

En definitiva, podemos concluir que en Alicante está pasando algo y que se está cerrando los ojos. La próxima tragedia del metro valenciano ocurrirá en Alicante, y entonces, todo serán lloros y lamentos y todos dirán: "Es una tragedia inevitable y fortuita. Nadie pensó que algo así podía ocurrir". Tendremos entonces a políticos y demás calaña muy compungidos, pero que seguirán jugando con vidas de personas en su particular ruleta rusa.


Post scriptum: Siendo hoy el día que es, no me resisto a apuntar un par de cosas sobre el caso del metro, recientemente reabierto. Ya se está denunciando que la jueza, la misma que ya lo cerró en dos ocasiones anteriores, o que permitió la destrucción de la unidad accidentada a pesar de tener dos recursos judiciales pendientes, no está poniendo mucho interés. La cusa fue reabierta en su contra y a regañadientes tiene que volver a investigarla. Por ahora, esta nueva investigación está sirviendo para confirmar cosas que ya aparecían en mi libro. La última es que los datos originales de la Caja Registradora de Eventos no se borran automáticamente al volcarlos a un ordenador, como se afirmaba desde FGV para justificar la desaparición de esos datos originales en relación a la unidad siniestrada el 3 de julio de 2006. Sin embargo, la causa del metro camina hacia su entierro definitivo. Desgraciadamente, la jueza acabará archivándolo como ya hizo en las dos ocasiones anteriores. Y esto dejará a las víctimas más indefensas porque ahora el Gobierno valenciano podrá decir que el caso ha sido reabierto y archivado por la Justicia hasta tres veces y que en esta ocasión se investigó todo lo que querían las víctimas (frenos, ventanas, infraestructura...).

domingo, 2 de marzo de 2014

Drácula



A estas alturas, poco se puede añadir sobre esta inmortal novela escrita por Bram Stoker en 1897. Sin duda, ha resistido muy bien el paso del tiempo y aún hoy sigue destilando oscuridad y sigue siendo una gran novela de terror. Quizá porque apela a sentimientos que aún llevamos arraigados en nuestro interior. Contribuye a ello, además de los personajes creados por Stoker, ese estilo epistolar que hasta le da cierto realismo.
Drácula es una novela en la que uno puede disfrutar de la magia de la literatura, incluso de noche y con la única compañía de una lamparita encendida. La obra se puede completar con el relato El invitado de Drácula (también titulado El huésped de Drácula), capítulo suprimido de la obra original; y con Drácula: el no muerto, secuela escrita por Dacre Stoker e Ian Holt, basándose en las notas que el propio Bram Stoker dejó antes de morir.

sábado, 1 de marzo de 2014

Mi quiniela para los Oscar

Los Oscar se entregarán en breve. Como ya es tradición en este blog, dejo mis apuestas en esta entrada:




Mejor Película: Gravity
Mejor Director: Alfonso Cuarón, por Gravity.
Mejor Actor: Leonardo DiCaprio, por El lobo de Wall Street.
Mejor Actriz: Cate Blanchett, por Blue Jasmine.
Mejor Actor de Reparto: Jonah Hill, por El lobo de Wall Street.
Mejor Actriz de Reparto: Jennifer Lawrence, por La gran estafa americana.
Mejor Película de Habla No Inglesa: La caza (Dinamarca).
Mejor Guión Original: Spike Jonze, por Her.
Mejor Guión Adaptado: Terence Winter, por El lobo de Wall Street.
Mejor Montaje: Alfonso Cuarón y Mark Sanger, por Gravity.
Mejor Fotografía: Roger Deakins, por Prisioneros.
Mejor Banda Sonora: Steven Price, por Gravity.
Mejor Canción: Let it go (de la película Frozen: el reino del hielo).
Mejor Dirección Artística: Catherine Martin y Beverly Dunn, por El gran Gatsby.
Mejor Vestuario: Catherine Martin, por El gran Gatsby.
Mejor Maquillaje: El llanero solitario.
Mejor Sonido: Gravity.
Mejores Efectos Sonoros: Gravity.
Mejores Efectos Visuales: Gravity.
Mejor Película de Animación: Frozen: el reino del hielo.
Mejor Cortometraje de Animación: Cómo mola tu escoba.
Mejor Largometraje Documental: The act of killing.
Mejor Cortometraje Documental: Prison terminal: the last days of private Jack Hall.
Mejor Cortometraje de Ficción: Aquel no era yo.

Los Tudor



Los Tudor fue una serie que desde el año 2007, y durante cuatro temporadas, nos contó los excesos del rey Enrique VIII, tanto en su vida pública como monarca como en su vida privada, marcada por sus numerosos matrimonios. La ambientación y el trabajo de Jonathan Rhys Meyers son sus mejores bazas.
Los más puristas dirán que no es una serie estrictamente histórica (se toma algunas licencias, empezando por el cásting, donde Rhys Meyers, a pesar de su gran trabajo, no encaja físicamente con Enrique VIII). Aún con eso, no deja de ser una de las mejores series que se han realizado últimamente.