Me atrevería a calificar a esta película israelí, dirigida por Ari Folman, como una de las mejores películas de animación dirigida a adultos de la Historia. Incluso, yendo más allá, se podría calificar del mejor documental de la Historia. No en vano, estuvo nominada al Oscar a la Mejor Película Extranjera en el 2008. Supone un auténtico mazazo a la memoria histórica (tanto a la personal como a la colectiva) de un país como Israel. Y también a su conciencia.
En ella, el propio Ari, un personaje más de la película, descubre que no tiene ningún recuerdo de su participación en la guerra del Líbano de 1982, y más concretamente, de las matanzas de los campos de refugiados palestinos en Líbano de Sabra y Chatila. Poco a poco, irá indagando en su propia memoria y en la de otros compañeros que participaron e irá descubriendo su verdad, la verdad de todo un país.
Como decía al principio, es una gran película con una gran banda sonora, un dibujo y una animación increíbles y escenas sublimes. Destaco dos de ellas, con sendos clips: la escena de la playa y el vals que da nombre a la película.
Una película que, sin duda, queda grabada en la memoria durante mucho tiempo. CINE con mayúsculas.
Entradas
5 comentarios:
No la conocía, a ver cómo la consigo para verla.
Me han entrado ganas de verla. Excelente reseña. Besos.
Dezaragoza: Espero que consigas verla, porque merece la pena.
Isabel Romana: Espero que te guste. Besos.
La tenía pendiente, pero ayer la vi, animado por tu post.
Realmente buena, dura, y con un final al fundir imagen real y animación tremenda.
Tremendo documental, a recomendar...
Me alegro de que te gustara.
Ese final al que aludes es lo que, según mi opinión, nos hace olvidarnos de que todo es una película y lo que convierte a la película en un documental.
Publicar un comentario