Cuando el periodismo se transforma en una obsesión por descubrir una verdad inexistente, que sólo existe en la cabeza del responsable de la idea que se quiere transmitir, nos encontramos ante un periodismo manipulador y mentiroso, capaz de publicar cualquier cosa con tal de mantener su verdad. Lo hemos visto en los cientos de capítulos que el diario El Mundo ha dedicado al 11 de marzo. Pero ante estas burdas manipulaciones, ante las que estamos indefensos los ciudadanos, nos encontramos ante un Estado débil, que no es capaz de defendernos, por miedo a que hablen de que están coartando la libertad de expresión.
El verano pasado, se condenó a Telemadrid y El Mundo. La razón es que en un documental titulado 11-M: historia de una atentado, aparecía la fotografía de un ciudadano español de origen sirio, llamado Ahmad Mardini, el cual había sido detenido por error el 13 de noviembre de 2001 (puesto en libertad enseguida). Su imagen apareció en este documental el 10 de marzo de 2005 (un año después de los atentados de Madrid) como dueño de la casa de Morata de Tajuña, donde los terroristas montaron las bombas.
El documental, además, se emitió en televisiones autonómicas de Valencia, Galicia y Baleares (600.000 personas vieron el documental) y se vendió junto al diario El Mundo (lo producía El Mundo TV) y por Internet. Para colmo, 24 horas después del documental, y tras una rectificación en pantalla de la cadena, volvía a aparecer su imagen, vinculada al 11 de marzo, durante un debate en Telemadrid.
Y como decía, ante "fallos" de esta índole, la Justicia y el Estado nunca están de parte del afectado. A Telemadrid y El Mundo TV sólo les costó 30.000 euros. Mañana, cualquiera de nosotros podría haber participado en los atentados de Madrid, o ser miembros de ETA o, incluso, haber matado a Kennedy y estaríamos completamente indefensos ante SU libertad de expresión (que yo no considero como tal).
No sería la primera vez.
lunes, 5 de enero de 2009
Todos podemos ser terroristas
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6 comentarios:
A veces la realidad supera la ficción. ¿Has visto la pelicula Rendition? Te la recomiendo.
Cuando se trata de buscar "culpables" vale cualquier cosa aunque a mi me resulta más preocupante que la gente no se capaz de analizar y se lo "trague" todo sin rechistar....
La he visto. Creo que aquí se tituló "Expediente Anwar" y, de ehcho, ya le dediqué una entrada porque es una película muy clarificadora sobre esa paranoia de "árabe=terrorista" (http://kurtzpensamientos.blogspot.com/2008/08/expediente-anwar.html).
Aunque más me sorprendí cuando descubrí que está inspirada en un hehco real (cosa que tampoco debería extrañar).
Llevas razón en todo lo que dices. Solo quisiera que nos parásemos a pensar un poco en lo que ocurre en la Red. En la Red de redes, el ciudadano de a pie, también amparado en la libertad de expresión, es capaz de difundir cualquier bulo, cualquier teoría de la conspiración, acusar de faltas gravísimas a quien les parezca oportuno y se quedan tan anchos. Ejemplos hay por miles, tú mismo lo descubristes el otro día. El tal Sorel hacía apología del crimen, del racismo, de la xenofobia, incitaba o deseaba que el Estado se convirtiera en asesino y no pasa nada. Ejemplos como Sorel hay muchos, nombraré solo unos cuantos porque "no me da la gana dejarlos pasar por alto". En la blogosfera nadie dice nada porque forman parte de su dinámica de captación de público tanto para blogs, páginas webs como diarios digitales. "ballarrasa", "español", "Federriko", "anónimos por doquier", "sevillano", "Joaquín", "Ecuanimizado de serie"... y un largo etcétera. No nos fijemos solo en los medios, recapacitemos nosotros sobre en qué contribuimos en el asunto.
La diferencia está, creo yo, en que no es lo mismo que yo me invente una conspiración que la invente un periodista profesional. No es lo mismo que yo me invente una pirula en mi blog (los blogs, salvo contados casos o blogs de gente importante o famosa no tienen mucha audiencia) que lo haga el director de uno de los periódicos con más tirada de España en la portada de su periódico o con un documental que se ve en las teles de toda España y después se distribuye con ese periódico.
Yo puedo decir que Zapatero es el hombre de Ben Laden en España y me tomarán por un friki (alguien lo creerá). Pero si lo dice Pedro J, ten por seguro que más de uno personas lo creerá.
No te quito razón ninguna. Pero a mí me preocupan más los ciudadanos de a pie a los que se les permite todo, que lo diga don Pedro José al que ya todo "el mundo" conocemos y sabemos de sus "sindicatos del crimen", de sus "robos a los espacios naturales públicos", de sus "miserias sexuales", de sus "chantajes económicos a moritos de lavapiés", ... Con esa trayectoria el que aún se crea al insigne intelectual tiene un grave problema.
Bueno, hay tantos periodistas por ahí con trayectorias igual de ilustres a los que la gente sigue creyendo.
El problema es cómo discernir la verdad y la mentira. Si antes ya era difícil, con los medios de comunicación tradicionales, ahora con Internet, y como tú señalas, con el periodismo ciudadano, sin duda es más difícil.
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