viernes, 23 de enero de 2009

La extraña Justicia


(Foto extraída de aquí.)

En España la Justicia es ciega. Pero ciega, ciega, ciega. Sino, que se lo digan a la mujer sentenciada por pegarle un bofetón a su hijo.
En la Comunidad Valenciana, además, está al servicio de los poderosos. Ahí está el caso Fabra (y los jueces de Castellón, encima, tienen la poca vergüenza de sumarse a la huelga de jueces del 18 de febrero).
Así, el agricultor ecológico Vicent Martí de Alboraia, ha sido juzgado hoy (desconozco si condenado, pues no he visto ninguna información al respecto). Su delito ha sido únicamente defender l'Horta frente a la especulación urbanística y depredadora que se practica en nuestra comunidad. Él, y cuatro miembros de la plataforma Salvem l'Horta d'Alboraia, desplegaron una pancarta contra la eliminación de la huerta durante un pleno en diciembre de 2005.

Y mientras, la huerta desaparece y los que la defienden se enfrentan a juicios por defenderla. Así va la Justicia. Y luego dirán que aquí hay libertad de expresión. Seguro que si hubiera sido la pancarta de alguna de las marujonas que siguen a Rita Barberá en sus plenos en Valencia, nadie hubiera dicho nada.


4 comentarios:

Folks dijo...

Tras las vistas, las sentencias pueden tardar varias semanas -Algunos prefieren llamar a tal cantidad de semanas, varios meses.

Si ha sido juzgado hoy, habrá que esperar sentados.

Kurtz dijo...

Esperemos que, al menos, se haga Justicia.

Ángela dijo...

¿Cómo se le ocurre a ese hombre anteponer l'Horta d'Alboraia a los intereses de especuladores? Qué osadía...

Señor, señor...

Kurtz dijo...

DEsde luego, mira que intentar rebelarse con lo bien que está uno calladito en casa y dejando que, entre políticos y especuladores, se carguen todo...