viernes, 30 de enero de 2009

Caso Mercalicante: otro que se va sin pagar

En el mes de septiembre del pasado año dimitía, por sorpresa y sin explicación (y al mismo tiempo que eran detenidos cinco empresarios corruptos que pretendían huir a Marruecos, uno de los cuales había realizado operaciones sospechosas con Zaplana y había tenido "contactos" con el propio Alperi), el alcalde de Alicante, Luis Díaz Alperi, después de haber amenazado a la oposición socialista de no pagarles (otro que se gasta los modales de Fabra). Sospechosamente, sigue manteniendo su condición de diputado.

Luis Díaz Alperi ha sido imputado por varios delitos urbanísticos. Pero el más conocido es el caso Mercalicante, en el cual, a pesar de que se han visto indicios delictivos en su actuación, no ha sido procesado.

El caso estalló en 2002, cuando una auditoría reveló irregularidades en la contabilidad de la entidad. Al parecer, entre 1999 y 2001 se utilizaron diferentes proyectos como tapadera para realizar movimientos económicos. El desfalco se calcula en unos seis millones de euros (calderilla para lo que otros han robado). Los principales imputados son:


-Luis Díaz Alperi: Como ya he dicho, recientemente dimitió de su puesto de alcalde de Alicante.


-Juan Zaragoza: Edil de Hacienda.


-José María Rodríguez Galant: Director general de la Ciudad de la Luz (uno de los proyectos estrella de Camps, unos estudios de cine Alicante convertidos en un fiasco; toda película, nacional o internacional, rodada allí ha sido un fracaso de taquilla).


-José Emilio Clavero: Principal acusado al ser el ex gerente de la empresa.

4 comentarios:

dezaragoza dijo...

Mira, de este asunto no tenía ni idea. Otra información al saco.

Kurtz dijo...

No es un caso al que se le haya dado tanto bombo como al de Fabra o el de Terra Mítica, pero en Alicante, como es lógico ha tenido bastante repercusión.

Anónimo dijo...

Pero éstos, como dice Wayoming en su entrada de hoy de su blog Asuntos y Cuestiones, siempre son presuntos.

Kurtz dijo...

Y seguirán siendo presuntos toda la vida porque nunca se les juzgará.