lunes, 6 de diciembre de 2010

Sobre los controladores aéreos

Me sorprende los propensos que estamos en este país a tragarnos una versión sólo porque es la que exprimen los medios de comunicación.
Así, en el conflicto de los controladores aéreos, todos nos creemos la versión del Gobierno sólo porque es la única que han mostrado los medios de comunciación. Se habla de que los controladores son unos privilegiados, de que cobran mucho, de que están todo el día viendo despegar y aterrizar aviones y otras chorradas similares.
Como ya he dicho otras veces, todo el mundo tiene derecho a huelga. Ahora bien, creo que lo del caos del otro día no era una huelga: era un suicidio del colectivo de controladores aéreos, como ha demostrado la animadversación que han despertado en la sociedad y la respuesta del Gobierno (exagerada, para mi gusto, y que le hará ganar algún puntito en las encuestas durante, al menos, un par de meses).
Con respecto al sueldo de los controladores, por los textos que están saliendo por ahí, parece que no todos cobran esas cantidades exorbitadas de las que hablaba el ministro Blanco. Aún así, creo que estarían justificadas. Al fin y al cabo, ellos realizan un trabajo, que exige una cierta tensión (me gustaría a más de uno verlo dirigiendo el tráfico aéreo). Por cierto, ¿por qué se habla del sueldo de los controladores y no se habla del de los directivos, por no hablar del de los políticos, que esos sí que cobran cantidades astronómicas por no hacer nada?
También hay quien dice que los controladores tienen demasiados privilegios, algo de lo que se culpa a Zapatero, cuando el convenio sobre el que se asienta este conflicto fue firmado en 1999.
Y habría que explicar, asimismo, por qué AENA tienen una gestión tan deficitaria. Y antes de que alguien tenga la tentación de culpar al supuesto sueldo alto de los controladores, que investigue cuantos aeropuertos inútiles (Huesca, Lleida, Castellón...) hay repartidos por toda España.
Y por último, la militarización de las torres de control tampoco me parece una solución efectiva. Y ahora se habla de despidos masivos, sustituyendo a los controladores aéreos por controladores militares. No es lo mismo un controlador civil que uno militar. Hay precedentes: una huelga de controladores en Francia en 1973. Dos aviones españoles chocaron en el aire en Nantes. Uno logró aterrizar con un ala rota. El otro se estrelló provocando la muerte de 68 personas.
Lo que creo que deberíamos hacer los demás es tomar ejemplo, dejar de lloriquear porque un colectivo se ha puesto en huelga y ponernos nosotros también. Deberíamos paralizar este país en la calle. O vamos a esperar a quejarnos cuando este Gobierno, supuestamente socialista, nos aplaste la cabeza con su bota.
Por cierto, un último apunte: ¿por qué el Gobierno dice que va a ser inflexible con los que desafíen al Estado (los controladores) pero no lo es con otros que también desafían al Estado (los mercados)?


El otro punto de vista sobre los controladores aéreos: A ver si nos entendemos, No controles, El Soylent Green es gente, El asno, el palo y la zanahoria, Yo también soy controlador, El conflicto de los controladores aéreos, la otra cara, Controladores: ¿cuánto vale nuestra vida?, Lo de los controladores, La carambola perfecta, rien ne va plus, De controladores y paros, Controladores, luces y sombras.

4 comentarios:

Baubiel dijo...

muchas gracias, pensaba que estaba loca por pensar así cuando todo el país clama por quemarlos en la hoguera...
hasta me he llevado broncas de los amigos, tú figúrate. Ni siquiera soy controladora, sólo digo que me parece una salvajada sacar los tanques a la calle y que falta su punto de vista en esos telediarios propagandistas de hora y cuarto que nos inflingen...

Los controladores que yo he conocido, por cierto, tenían un sueldo de 6.000 euros al mes, esto hace 72.000 anuales. Si de ahí a los 300.000 lerus que dice Pepiño que se llevan a casa "todos" (ja ja) el resto son horas extras... por muy bien que se las paguen son una salvajada de horas extras.

Llamadme loca, pero no soy partidaria de que el notas que vigila los corredores y separa los aviones en los que yo viajo, esté puesto de café hasta los cojones, ojeroso y atacado en su hora de trabajo número diez.

He vivido suficientes privatizaciones para saber que deberíamos apoyar a los controladores en su huelga, porque aparte de sus derechos están defendiendo la calidad en el servicio, es decir, nuestra seguridad.
1650 horas anuales suponen una jornada de 34 horas semanales, que teniendo en cuenta la complejidad de su trabajo, y el hecho de que van a turnos, me parece más que suficiente.

Kurtz dijo...

Uff... Yo las broncas las he tenido, directamente, con mi familia.
Pero bueno, es lo que tiene que sólo se conozca un punto de vista porque el otro puede resultar impopular o contraporducente para los gobernantes.

Anónimo dijo...

Resulta incomprensible que pueda ser posible que un grupo de privilegiados pueda poner al Estado en jaque. En un pais donde el 40% de los que trabajan tiene un sueldo de 1000 €, donde el 20% no tiene ni eso porque está en paro, una casta de bienpagados con dinero público se siente legitimado de poner al pais patas arriba para mejorar, todavia más, sus condiciones laborales de lujo. Y todo eso haciendo de cada español su enemigo, de forma masiva y sin calcular las consecuencias personales y como colectivo de su sctitud.

Algunos de ellos le han tomado gusto a los medios de comunicación y se prodigan por television enseñando su careto a diestro y siniestro, haciéndose ver ante sus millones de enemigos. A estos enemigos anónimos los van a encontrar en restaurantes, hospitales, en el cine, en todas partes y los sufridores de sus hazañas se han quedado con su cara.

No se puede estar enemistado con el mundo y esperar que millones de personas actuarán civilizadamente y racionalmente cuando han sido agredidos de forma irracional y no civilizada, además de ilegal.

Kurtz dijo...

¿Y por qué no ese 40% de mileuristas y ese 20% de parados sale a la calle a protestar?