miércoles, 12 de mayo de 2010

Continúa el caso Gürtel en Valencia


(Diferentes imágenes de archivo que muestran las diferentes actitudes de Camps ante el caso Gürtel. La última imagen es de hoy, publicada en El País.)

Hoy, el Supremo ha decidido reabrir la causa contra Camps. Así pues, el juez José Flors, del TSJV, que ya se mostró partidario de continuar la investigación en su día, podrá continuar dicha investigación. Esta vez, además, será bastante difícil que esté el "más que amigo" de Camps, Juan Luis de la Rúa, para salvarlo. De la Rúa no se presentará a la reelección como presidente del TSJV (aunque es cierto que su mandato ya había terminado cuando archivó la causa contra Camps). Por cierto, es curioso que todos se empeñen en empapelar a Garzón y a De la Rúa lo dejen tan tranquilo.
Si el día de hoy no será precisamente tranquilo para Camps y compañía, el día ayer tampoco lo fue. Ayer, Hacienda confirmó que el PP valenciano ocultó más de 2 millones de euros en las elecciones de 2007. Además, a través de Orange Market (la empresa de El Bigotes), "terceras personas" pagaron los actos electorales del PP valenciano.
Según Hacienda, en 2007 Orange Market recibió un total de 3,3 millones de euros. De esa cantidad, 2,8 millones fueron en B (en una cuenta que la trama llamaba Barcelona) y 573.000 euros en A (cuenta llamada Alicante). Al PP de Francisco Camps, Orange Market le cobraba unas veces en A, y otras en B. Además, Orange Market recibió, también en 2007, 200.000 euros en dinero negro de alguien identificado en la contabilidad como El Príncipe, y en A se ingresaron 199.000 euros de alguien apodado como El Cantante. Hacienda asegura en su informe que "una parte de la campaña de 2007 fue pagada [a Orange Market] por el PPCV y otra por parte de terceros". La Agencia Tributaria asegura desconocer quién es El Príncipe, pero aclara que el pago de 200.000 euros en dinero negro aparece junto a los pagos del PP valenciano en la contabilidad y que fue usado para pagar la campaña electoral.
Hacienda también tiene "dudas razonables" de que los servicios de Orange Market a supuestas empresas de Valencia "sean reales" y apunta que pudieron usarse para "encubrir realmente servicios" al PP valenciano "en el marco de las elecciones Autonómicas y Locales del 2007". Además, el análisis de la información incautada tanto al contable valenciano, Cándido Herrero, como al madrileño, José Luis Izquierdo, muestra que de la caja B de Orange Market salía dinero para la sede de la trama Gürtel en Madrid. Con este dinero negro, la trama sobornó a parlamentarios y alcaldes del PP para conseguir adjudicaciones de las administraciones públicas, según se explica en el sumario. Según la investigación de Hacienda, entre 2004 y 2007, El Bigotes y Pablo Crespo desviaron 1,8 millones de euros de Valencia a Madrid.
La reacción del PP ante este informe ha sido querellarse contra el funcionario de la Agencia Tributaria (funcionario NUM. 21536), que firmó el informe el 6 de mayo de este año, por "prevaricación y falsedad en documento público".
También ayer supimos, por la denuncia del PSPV, que Orange Market obtuvo beneficios del 500% gracias a la Generalitat valenciana. Un beneficio, cuanto menos, sospechoso. En 2003, cuando Orange Market comenzó su actividad, facturó 88.000 euros. Sólo tenía tres clientes, uno de los cuales, era otra empresa de la trama corrupta: Special Events. En 2004 ingresó 237.000 euros y sólo logró un contrato a través de VAERSA. En 2005, facturó 2,8 millones, de los cuales, la mitad pertenecían al contrato adjudicado por la Agencia Valenciana de Turismo para el montaje de un pabellón en la feria de turismo de Madrid por 1,57 millones. Aquí comenzó el baile de trajes regalados: Rafael Betoret (jefe del gabinete de la consellería de Turismo y vicepresidente ejecutivo de la agencia Valenciana de Turismo), recibió en ese 2005 seis trajes a medida, un abrigo, un pantalón y tres americanas. Ricardo Costa, recibió tres trajes entre enero y diciembre. Víctor Campos (vicepresidente autonómico), recibió tres trajes, dos americanas y cinco pantalones. Los regalos siguieron en 2006 e incluyeron a Francisco Camps, que entre 2006 y 2007, recibió cinco trajes, cinco americanas y dos pares de zapatos.
Todo demasiado sospechoso como para pasarlo por alto.
Con todo, aunque la mayoría de líderes del PP (tanto a nivel nacional como a nivel de otras comunidades autónomas), y a la espera de cómo irán reaccionando hoy, una de las voces críticas es la de Juan Costa, ex ministro, diputado de Castellón y hermano del malogrado Ricardo Costa, el cual exigió a Camps que dé explicaciones aunque sea algo incómodo. porque teme que la corrupción le pasé factura al PP y no puedan aprovechar la debilidad de Zapatero ante la crisis.
De momento, Camps permanece desaparecido desde ayer.

CONTINUARÁ

2 comentarios:

Anónimo dijo...

Afortunadamente me equivoqué. A ver si es verdad que lo enchironan. Con todo lo que han robado en los años de bonanza, en los años del "milagro económico", habría ahora para no cargar la crisis sobre los de siempre. ¡Qué poca vergüenza y dignidad hay que tener para salir a la calle como lo hacen Aznar, Rajoy, Camps, Barberá, Arenas...!

Kurtz dijo...

Eso esperamos, que la imputación se traduzca en un enchironamiento.