La bestia de la guerra

Durante la invasión soviética de Afganistán, la tripulación de un tanque soviético lleva a cabo una matanza en un pequeño pueblo pacífico (con la inclusión de una de las escenas más brutales que se pueden ver una película). Cuando sale del pueblo, sin embargo, la tripulación se equivoca de dirección y acaban metiéndose en un valle desértico. La tripulación no se enfrenta sólo a la brutalidad y locura de su propio comandante, un hombre despótico, sino también a constantes ataques de la guerrilla afgana y los supervivientes de la matanza.

La bestia de la guerra es una película que se desarrolla prácticamente en el interior del tanque, lo que la convierte en una película claustrofóbica, incluso cuando los soldados están fuera del tanque. Es un claro alegato contra la guerra (al final, se muestra a los guerrilleros igual de embrutecidos por la guerra que los propios soldados soviéticos). Me recordó, en parte, a Apocalypse now, cambiando el río por un valle desértico y la barcaza por un tanque.

La película fue dirigida en 1988 por Kevin Reynolds. Me costó creerme que los actores fueran creíbles como soviéticos (el elenco está capitaneado por Jason Patric y también se puede encontrar al más desconocido de los hermanos Baldwin: Stephen Baldwin). Sin embargo, La bestia de la guerra es una muy buena película que muestra a la guerra como lo que es: un monstruo que a todos alcanza y deshumaniza.