Dirigida por Harold Ramis, y protagonizada por actores tan solventes como John Cusack, Billy Bob Thorton y Connie Nielsen, La cosecha de hielo fue una película que me sorprendió, para bien.
Está ambientada en vísperas de Navidad, en una nevada ciudad. Un picapleitos de negocios bastante oscurillos y su cómplice acaban de estafarle más de dos millones de dólares a un capo mafioso. El picapleitos tiene en mente coger su parte del botín y fugarse con la dueña de un club de striptease. Sin embargo, las cosas irán complicándose durante la noche.
Es una comedia negra, con algunos toques de acción que, principalmente, se sostiene gracias a la labor de sus actores (otros hubieran fracasado en el intento, seguro). A pesar del ambiente navideño, es una de esas película que cargan contra esa mentalidad del género navideño.
Tiene, eso sí, momentos regulares, pero sin embargo, se deja ver. No hay que esperar una obra maestra (ni pretende serlo), pero tampoco es una basura desechable.
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