Navarra vs Valencia

Este domingo, Joan Ignaci Culla, presidente de la entidad cultural Renaixença Valencianista, escribía este artículo en el diario Las Provincias. No voy a reproducir aquí el texto (quien quiera leerlo, que siga el enlace), porque ya escribo yo suficientes tonterías como para reproducir las tonterías supinas que escriben otros. Bastará decir, simplemente, que es otro de esos textos que sirven para intentar azuzar la paranoia anticatalanista.
En el texto, el autor trata de establecer un paralelismo entre el "histórico reino de Navarra" (¿No será Reyno de Navarra?) y el de Valencia, ambos amenazados y atacados por los dos principales nacionalismos de España (sin contar el propio nacionalismo español), el vasco y el catalán, respectivamente. Por supuesto, no se especifican dichos ataques.
El autor habla entonces de un triunfo contra esos nacionalismos borra-identidades. Un triunfo que se produjo el 27 de enero, cuando la sala de lo contencioso-administrativo del Tribunal Supremo de Justicia del País Vasco anulaba los apartados del currículum vasco de Educación Básica donde se incluía a Navarra dentro del ámbito territorial de Euskal Herria.
Para este autor, dicha sentencia es un éxito porque supone un reconocimiento de la identidad navarra frente a la de esa Euskal Herria inventada por el nacionalismo vasco. Sin embargo, extrañamente, atribuye el éxito al Gobierno de Navarra y lo contrapone con la actitud sumisa del Gobierno valenciano con respecto al tema catalán.
Incluso llega a decir: "No hay más que comprobar los materiales curriculares con los que dogmatizan a nuestros alumnos plagados de "països catalans", unificación de las lenguas, adulteración de nuestros clásicos o reinterpretaciones históricas, para evidenciar la dejación de funciones de aquellos que dicen defender nuestra historia". Dejando a un lado que parece que el autor diga que los que están "plagados" de "Païssos Catalans" son los alumnos (esa redacción...), yo empecé a estudiar en Valencia a partir de 1º de ESO y nunca me dijeron nada sobre Païssos Catalans. Sobre reinterpretaciones históricas y adulteración de clásicos, nada mejor que hablar con blaveros para comprobarlo.
La última frase del artículo es toda una declaración de principios: "Agallas en Navarra frente a los vascos, pleitesía en Valencia frente a los catalanistas". Mientras que en el caso de Cataluña si que distingue a los nacionalistas ("catalanistas"), en el caso de los vascos no hace esa distinción.
Si se ha producido esa sentencia de la que hablaba el autor es, entre otras cosas, por el cambio político vasco (¿Acaso, teniendo en cuenta lo manipulada políticamente que esta la Justicia en este país, se hubiera producido esa sentencia con Ibarretxe en el poder?). Tampoco tiene en cuenta una cosa el autor: el radicalismo del mensaje contra el nacionalismo vasco ("Los vascos quieren cargarse la identidad de Navarra", "Zapatero vende Navarra al nacionalismo vasco y a ETA", "Nos quieren quitar los Fueros"...), con esa manifestación organizada por Rajoy (que fue un fracaso) en favor de los Fueros de Navarra, llevaron a que UPN perdiera la mayoría absoluta de la que gozaba en Navarra, y acabara despojándose del PP. Todo lo contrario a lo que pasa en la Comunidad Valenciana con respecto al mensaje anticatalanista del PP.
No creo que exista esa agresión catalanista contra Valencia (¿cuántos catalanes, nacionalistas o no, quieren realmente la independencia?). Pero si existiera, y no se estuviera haciendo nada contra ella, habría que achacarlo al meninfotismo propio de la sociedad valenciana, algo muy propio en cualquier frente social valenciano. En Navarra, en cambio, si ven sus símbolos identitarios amenazados, se defenderán. Y no necesitan que ningún político, ni nadie de fuera les digan que esas amenazas se están produciendo. Ahí está la Gamazada para recordarlo.
En un mundo sin gilipolleces tales como banderas, fronteras, símbolos, razas y patriotismos chorras, estas cosas no serían importantes. Pero desgraciadamente no vivimos en ese mundo y estos mensajes, en una sociedad tan idiotizada y aborregada como la valenciana triunfan. Y aunque la intención del autor del texto era criticar duramente a la Generalitat para favorecer a otros partidos más blaveros, lo único que conseguirá es que el partido nacionalista valenciano recoja el mensaje y lo utilice para ganar votos. ¿Coalición Valenciana? No, me estoy refiriendo al Partido Popular de Valencia.