viernes, 10 de febrero de 2012

Todo gira alrededor de Gürtel

Desde que la Comunidad Valenciana empezó a verse salpicada en su totalidad por casos de corrupción, vengo diciendo que en realidad, todos esos casos son parte del mismo. Hay señales que así lo parecen.

Por ejemplo, la policía investiga si Urdangarín, yerno del rey, realizó pagos a Álvaro Pérez, el hombre de la trama Gürtel en Valencia. Al parecer, la empresa Octagon Esedos está siendo investigada dentro de la operación Babel. Esta empresa estaba participada por Namaste 97, sociedad que era propiedad de la infanta Cristina, dos de sus hijos y un socio de Urdangarín. Además, el propio Urdangarín ha estado muy relacionado con Octagon Esedos. De 2002 a 2003 fue el encargado de su desarrollo y planificación. Además, Octagon Esedos está participada al 25% por Motorpress, empresa en la que Urdangarín tuvo cargos directivos hasta 2009, y de la que recibió pagos de hasta 1,3 millones.
Con todo, Octagon Esedos firmó contratos bastante lucrativos con administraciones del PP, principalmente Baleares y Comunidad Valenciana. Y aunque Urdangarín ya no formaba parte de Octagon Esedos, sí que formaba parte de Motorpress. En el caso valenciano concreto, Octagon Esedos consiguió un contrato de la Generalitat valenciana, en 2006, para la gestión del Open de Tenis de Valencia. Según la policía (aunque la empresa lo niega), Octagon Esedos contrató a Álvaro Pérez, alias El Bigotes, para que amenizara la carpa de la Generalitat.
Aquel contrato fue por valor de 36.000 euros y aora la policía investiga si el servicio fue real o era una comisión para los políticos, algo que se está investigando dentro de la trama de financiación ilegal del PP valenciano.

Otro hecho relacionado con la trama Gürtel es nos viene de Alicante y Castellón simultáneamente. Y es que, tanto Sonia Castedo, alcaldesa de Alicante e implicada en el caso Brugal, como Carlos Fabra, expresidente de la Diputación de Castellón e imputado por varios delitos de corrupción, pudieron haber pagado a la trama Gürtel. Al menos, así lo cree la policía. Al parecer, en los documentos incautados a la trama, hay un personaje al que se denomina El Tuerto. Este "Tuerto" sería Carlos Fabra (que es tuerto, de ahí el apodo), quien se habría comprometido a reducir la deuda del PP con Orange Market, que ascendía a 90.000 euros.
Sonia Castedo también aparece señalada por la policía. En uno de los apuntes en la documentación de la trama, el 26 de septiembre de 2007, "Alicante Sonia" pagó 24.000 euros. El pago está relacionado con una serie de actos bajó el epígrafe común de "Alicante".

En definitiva, Gürtel sigue demostrando que no son sólo "cuatro trajes".

2 comentarios:

Unknown dijo...

No lo fueron desde el principio a pesar que Camps se empeñó en afirma que sí eran solo cuatro trajes. Cinco indocumentados le creyeron.

Kurtz dijo...

Lo malo de los mentirosos y manipuladores es que siempre hay gente dispuesta a creerles.