Valencia, una ciudad dividida en dos

Desde hace muchos años, Valencia es una ciudad dividida en dos. Dividida por las vías de los trenes que llegan hasta la Estación del Norte. Se lleva años hablando del soterramiento de las vías y la construcción del famoso Parque Central (un proyecto que cada vez tiene menos de parque y más de hormigón). Ahora, con la llegada del AVE, cuya estación definitiva, aún por construir, será subterránea, parece que se está acelerando el proyecto. Pero aún pasarán muchos años hasta que podamos verlo. Mientras tanto, Valencia permanece dividida por una cicatriz sobre su mapa.
Para cruzar las vías hay algunas opciones. La primera es un túnel subterráneo paralelo a la Gran Vía. Es un túnel inseguro y ruidoso. Siempre, llueva o no, está lleno de enromes charcos. Ayer, precisamente, pasaba yo por este túnel y una mujer delante de mí se resbaló y cayó al suelo, por suerte, sin mayores consecuencias. Algunas personas mayores no se atreven a cruzarlo por esta peligrosidad o la de la delincuencia. Además, es un paso subterráneo que no está adaptado para minusválidos (ni siquiera en su entrada a la estación de metro de Bailén). Y para los ciclistas se puso recientemente unos pasos de hierro para que pudieran bajar sus bicis que casi nadie utiliza.
Otra opción es la denominada Pasarela Iturbi. Es una pasarela de hierro del año de la tos, sin ningún tipo de protección. Ni siquiera le han puesto protección con la llegada del AVE, como si que han hecho en el puente de Giorgeta. Es una pasarela estrecha y sin rampas. Curiosamente, en esta pasarela termina un carril bici que tiene continuación al otro lado. Pero los ciclistas tienen que cargar con sus bicis para poder pasar al otro lado, molestando además, al resto de personas que pasan por la pasarela.
El último paso es el del Bulevar Sur que, éste sí, está en muy buenas condiciones por tratarse de una construcción más reciente. Pero claro, tampoco es cuestión de irse al límite de la ciudad y dar un rodeo enrome para poder cruzar las vías.
Y mientras algunos prefieren no ver algunos de los verdaderos problemas de la ciudad, otros proponen medidas concretas para paliarlos.