Un terremoto que revela que quedan muchas cosas por hacer

Ya se ha producido la primera cita electoral del año en España y lo resultados que arroja son muy interesantes. Para aquellos a los que nos entusiasma la política creo que este año va a resultar muy atractivo. Primero los resultados:

PSOE - 47 escaños (35,43%). En las anteriores elecciones logró 47 escaños.

PP - 33 escaños (26,76%). En las anteriores elecciones logró 50 escaños.

Podemos - 15 escaños (14,84%). En las anteriores elecciones no existía.

Ciudadanos - 9 escaños (9,28%). En las anteriores elecciones no existía.

Izquierda Unida - 5 escaños (6,89%). En las anteriores elecciones logró 12 escaños.

Mi opinión, por partidos políticos es la que sigue:

El PSOE se mantiene, aunque ha perdido ligeramente votos. A pesar de los escándalos de corrupción, los socialistas se mantienen como los más votados y, además, podrán gobernar sin necesidad de una mayoría absoluta. Esto supone un refuerzo de la figura de Susana Díaz, a la que muchos a ven como la nueva líder del PSOE nacional, por encima de Pedro Sánchez. Eso sí, la misma opinión que hago con respecto al PP de Valencia la hago con respecto al PSOE andaluz: ¿por qué se sigue votando a partidos que tienen la corrupción tan enquistada? Misterios de la política.

Dos partidos se hunden: PP e IU. El primero venía de ganar las últimas elecciones (aunque no pudo gobernar por el pacto PSOE-IU). Se deja por el camino 17 escaños. Izquierda Unida (IU) se deja por el camino 7 escaños  pasa de ser la tercera fuerza a ser la quinta. Lo del PP tiene fácil explicación: la política de Mariano Rajoy ha sido un lastre. Habría que decir que el verdadero perdedor no ha sido el PP andaluz (que también), si no Mariano Rajoy. En el caso de IU, el problema viene del mismo que tiene siempre la izquierda desde que existe: los egos. IU debería empezar a buscar confluir con otras fuerzas (y ya sabemos a qué fuerza concreta me refiero). Vivimos unos tiempos en que los partidos tradicionales están muy desprestigiados. Esto debería empezar a asumirlo IU.

Dos nuevos partidos han entrado, y con bastante fuerza: Podemos y Ciudadanos. El primero está un poco decepcionado. Ciertamente aspiraban a más. Pero en la reflexión de cada uno dejo pensar si esa aspiración era real o solo una estrategia calculada para enardecer a su electorado (aspiro a una parte, digo que aspiro a todo y consigo una parte mayor). En cualquier caso, Podemos sí que debe hacer autocrítica porque ha cometido varios errores que le pueden lastrar más aún en los comicios que se avecinan. En Ciudadanos sí que están exultantes. Para ambos partidos, el resultado es un golpe de fuerza de cara a las próximas elecciones generales y un éxito teniendo en cuenta la trayectoria de ambas formaciones. Aunque, eso sí, aún falta ver qué pasará en las elecciones autonómicas y municipales de mayo.

Por último quería nombrar a otros dos partidos que parecían tener cierta fuerza pero se han desinflado y han quedado fuera: UPyD y Vox. El primero se ha quedado a las puertas de la representación. Una derrota para un partido que lleva años intentando ser alternativa al bipartidismo (incluso antes que Podemos o Ciudadanos) pero que los votantes identifican demasiado con las prácticas de los partidos tradicionales. Al igual que a IU le conviene una alianza con Podemos y otras fuerzas de izquierdas, a UPyD le conviene aceptar su fracaso (el fracaso de Rosa Díez y su ego) y aliarse con Ciudadanos. Por otro lado, el partido ultraderechista Vox se ha quedado como novena fuerza, confirmando así el batacazo que sufrió en las elecciones europeas. Ni siquiera las polémicas de los últimos días, con esos vídeos delirantes en los que acusaba a Podemos de querer islamizar Andalucía y España, de querer vender la mezquita-catedral de Córdoba a los musulmanes y de querer arrojar homosexuales desde lo alto de la Giralda, han servido para que el partido atraiga votos.

Mi opinión definitiva sobre los resultados electorales en Andalucía es que lo que se ha producido es un terremoto. En realidad ese terremoto se lleva produciendo desde las elecciones europeas. Donde ese terremoto puede estallar definitivamente puede ser en las próximas elecciones municipales y autonómicas y en las generales. Pero para que ese terremoto haga efecto aún queda mucho por hacer. Y Podemos debe leer mucho y muy bien, y analizar al detalle, lo sucedido en Andalucía.

Y una última reflexión: ¿a quién se refería Susana Díaz con esta afirmación teniendo en cuenta que el PSOE gobierna Andalucía desde hace 30 años?