Hace unos días, Baltasar Garzón declaraba por un presunto (esa palabra que tanto gusta a la derecha cuando le interesa) delito de prevaricación al investigar el franquismo. La querella fue presentada por el sindicato de ultraderecha Manos Limpias (más bien Sucias, diría yo).
Y mientras nosotros encausamos a Garzón, juristas de todo el mundo lo defienden. Una vez más, España vuelve a quedar en evidencia.
Porque Garzón sólo es un prevaricador si investiga el caso Gürtel o el franquismo; cuando investigaba el GAL o a Pinochet, o cuando ordena detenciones contra el entorno etarra, entonces es un héroe.
En fin, quizá es que Garzón tenga un gemelo malvado.
viernes, 11 de septiembre de 2009
Todos contra Garzón
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