domingo, 15 de julio de 2007

La cultura del agua

En las últimas elecciones, uno de los temas estrella de la campaña fue el tema del agua: mucha gente cree aún que Zapatero nos está matando de sed. Y todo porque derogó el Plan Hidrológico Nacional, un plan que incluso la Unión Europea condenó.
A mí, el hecho de que una comunidad costera se muera de sed no deja de llamarme la atención. El verano pasado, uno de los más calurosos y secos, la Comunidad Valenciana fue la única de España que no llevó a cabo restricciones en el consumo del agua. ¿Tan grave es entonces el problema del agua? Grave es, pero tampoco hay que exagerar.
Las alternativas del Gobierno han sido, no sólo las famosas desaladoras, si no también, entre otras cosas, la depuración de aguas residuales. Pero aquí no interesa nada que venga de Zapatero.
Mientras el ex presidente de Baleares, Jaume Matas, aceptaba el dinero que le ofrecían desde el Gobierno Central para combatir la sequía, Camps lo rechazaba y, por ejemplo, paralizaba la construcción de la desaladora de Torrevieja.
Desde mi punto de vista, creo que hay que cambiar nuestra forma de ver el agua. Es muy fácil abrir un grifo y que salga agua, pero parece que nos cuesta cerrarlo, como si temiéramos que después no volviera a salir. Tampoco es lógico que se construyan megaurbanizaciones costeras que no tienen asegurado el suministro de agua (caso del Manhattan de Cullera, por ejemplo). Además, una urbanización no necesita un campo de golf para ser una urbanización. Y mejorar el regadío de los campos de cultivo también nos ayudaría a ahorrar mucha agua que se pierde.
Y, por último, Camps debería cambiar esa política de "a los socialistas ni en pintura". Si quiere hablar de falta de agua con otras comunidades, considero más importante que se reuna con los presidentes de Castilla-La Mancha, Aragón y Cataluña que con el presidente de Murcia.

4 comentarios:

PP NO dijo...

Si.. el agua después del terrorismo es un problema, y creo que tienes razón con que Camps se reuna con los presidentes de esas comunidades, no hay que quedarse con los brazos cruzados, si te enteraste de lo del vertido en las Islas Baleares, sabras que no fue por culpa del gobierno balear, pero una cosa es esa y otra Galicia, que el sr. Rajoy, Acebes y Fraga, tomaban el pelo a la gente con que no había marea negra o con los "hilillos de plastilina" de Rajoy, por culpa de ese error el sr. Fraga destrozo su carrera. Salud.

Kurtz dijo...

Bueno, el caso de la sequía y de los vertidos en el mar son diferentes, pero de ambos trata el PP de sacar rédito electoral mintiendo y utilizando el tema demagógicamente.
Salud.

Isabel Barceló Chico dijo...

Hacer del agua un arma política ya no nos extraña nada, llevan años con ese asunto. Lo malo es que muchos ciudadanos lo creen a pies juntillas y ni exigen al gobierno de la comunidad autónoma que haga políticas en consecuencia, ni critican para nada el desarrollismo urbanístico que está destrozando nuestro territorio. Un desastre.
Te comento, por si te interesa, que acabo de publicar una guía turística de "Valencia y su provincia" en la colección Destino de la editorial Everest. Si la ves por ahí, échale un vistazo y ya me dirás qué te parece. En cuanto al proyecto literario que llevas entre manos, estoy segura de que te saldrá muy bien. Como dicen algunos, hoy día, hablar claro en literatura es una revolución. Besos y hasta pronto.

Anónimo dijo...

Desde luego, no nos extraña, y menos en Valencia donde la demogogia en cualquier tema está a la orden del día. Pero, ¿qué más da mientras haya urbanizaciones con campos de golf (a las que, curiosamente, los que las defienden nunca podrán acceder)?
Le echaré un vistazo a esa guía si la veo y te diré que mi proyecto quizá vea la luz en septiembre-octubre en forma de autoedición a través de Internet.
Besos y hasta pronto.