viernes, 15 de agosto de 2008

Fabra


Todo lo que se pueda decir sobre Carlos Fabra, presidente de la Diputación de Castellón es poco. Un hombre al que le "toca" la lotería años sí y año también, que tiene la suerte de que cada poco tiempo cambien al juez que investiga sus delitos, que le regalan fincas como quien regala churros, que tiene un millón repartido en 94 cuentas bancarios diferentes... Ni Al Capone lo hubiera hecho mejor (claro que Capone fue detenido y encarcelado).
Claro que a veces hay una mínima luz en medio de casos tan oscuros. El Supremo rechazó, recientemente, el recurso de Fabra contra la investigación de su patrimonio familiar al considerar que no vulnera su intimidad.
Desgraciadamente esa luz se apaga rápidamente cuando uno se entera de que una y otra vez se aplaza la petición de refuerzos para el tribunal de Nules, que investiga el caso Fabra, con lo cual, el trasiego de jueces lo tenemos asegurado.
Tal como va la política y la Justicia en la Comunidad Valenciana (y en el resto de España), de nada sirven los buenos deseos de la Oposición ("En el caso Fabra se acabará haciendo justicia, porque así lo exige la sociedad democrática").

3 comentarios:

Irreverens dijo...

Jopé, pero es que ni siquiera es necesario recrearlo como en El padrino.
¡¡En la foto al natural tiene más pinta de mafioso que el mismísimo Corleone!!
:-(

grrrr

Jove Kovic dijo...

La lastimosa situación de la justicia resulta esencial para entender buena parte de estas corruptelas enquistadas en la Administración.
Una vez más, me has hecho venir a la memoria algunos políticos catalanes.

Kurtz dijo...

Irreverens: esas gafas de sol que no se quita ni para dormir le dan un aire a Corleone, ¿verdad?

Jovekovic: la política está corrupta. La Justicia también. Pero, ¿dónde está la sociedad para exigir y reclamar? ¿Por qué estamos tan adormecidos? ¿Por qué elecciones tras elecciones ganan los mismos?