El ATO va a resultar menos seguro de lo previsto

Una de las exigencias de la Asociación de Víctimas del Metro de Valencia era la instalación del sistema ATO en los trenes del metro de la Línea 1, en la que se produjo el accidente del 3 de julio de 2006. Esto había sido una promesa realizada por aquella comisión parlamentaria realizada tras el accidente. Se había prometido para noviembre del 2010 aunque no fue instalado hasta marzo de este año.
Podría ser una buena noticia, aunque llegue con mucho retraso, pero como siempre, tenemos que hablar de una chapuza valenciana. Y es que el sistema acabó instalándose deprisa y corriendo por la cercanía de las elecciones y no deja de registrar incidentes y quejas de los trabajadores.
Se supone que es un sistema automático y que debería reducir la necesidad de personal en la cabina. Sin embargo, se han dado casos de trenes que se han saltado varios discos en rojo, lo que obliga al maquinista a actuar para controlar la máquina. En otras ocasiones, los trenes frenan unos metros antes de llegar a la estación donde debe parar, para después volver a ponerse en marcha y, esta vez sí, parar en la estación.
En definitiva, sólo la Generalitat es capaz de estropear una buena noticia.