Si algo ha demostrado la recién acabada Liga de Fútbol es que este deporte también es un negocio más. Y como ejemplo, los dos equipos de la ciudad de Valencia: el Valencia CF y el Levante UD.
Ambos equipos han tenido un año desastroso, a pesar de que el Valencia ganó la Copa del Rey. Pero es que en Valencia tenemos mala suerte con los que dirigen lo que sea, ya sean políticos, empresarios o presidentes de un club.
-En el Valencia CF, por ejemplo, ya dejaron escapar al entrenador Rafa Benítez el cual demostró lo que podía haber hecho con el Valencia ganado al año siguiente la Champions League con el Liverpool. Y tener como presidente a Juan Bautista Soler (un constructor) no ha beneficiado en nada al club valencianista. ¿Por qué? Porque Soler tiene casi tanta idea de fútbol como yo, o sea, nada. A él sólo le interesaba dar unos cuantos pelotazos urbanísticos (Porxinos, nuevo Mestalla con hotelito y todo...) y si el club se hunde, a él que lo registren. Y ahora, Juan Villalonga parece que quiere acudir al rescate del club. Será peor el remedio que la enfermedad. Esperemos que si se hace con el club, no se convierta en otro Peterman. Aunque el equipo sabe que siempre podrá contar con ciertos gobernantes de nuestra ciudad y nuestra comunidad.
-En el otro polo se sitúa el Levante, cuyo equipo atraviesa una crisis económica que estuvo a punto de provocar una huelga de jugadores las últimas jornadas. de hecho, los jugadores y empleados no cobraban. Se llegó a pedir el mismo trato de favor que al Valencia CF, pero lo más que se logró fue arrancar una "preocupación" de Rita Barberá. De hecho, desde el club aseguran haberse sentido arropados en sus reivindicaciones por toda España excepto por Valencia. Y es cierto, porque el Levante no parece un equipo de la ciudad. Después de la recalificación de los terrenos del (viejo) Mestalla, fue el propio Levante el que pidió lo mismo para ellos, con toda la razón del mundo. Desde el ayuntamiento, se beneficia a un equipo (el Valencia CF) y se margina al otro (el Levante UD).
En fin, como casi siempre pasa en esta ciudad, la política y el negocio ensucian todo lo que tocan.
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6 comentarios:
Hola Kurtz! Hace tiempo que te leo y que te he enlazado, y hoy por fin me decido a comentarte.
Lo que cuentas de Valencia y sus clubs de fútbol creo que se puede extrapolar a otras ciudades. Casi todos arrastran deudas millonarias y el agujero aumenta progresivamente amenazando con quiebra. Lo triste es que seremos nosotros, los ciudadanos de a pie, los que gracias a nuestros impuestos, y también gracias a complejas operaciones urbanísticas, y a través de los ayuntamientos y los mediocres políticos que sufrimos, alimentemos la grave situación y permitamos que sus directivos especuladores vuelvan a las andadas.
Hay que recordar que la mayoría son sociedades anónimas, qué caray, que se las apañen ellos solitos.
En fin, un placer leerte, de verdad, y gracias por pasarte por mi faro que también es el tuyo, y por haberme linkeado a su vez.
Petons
El fútbol es una mierda...Aléjate de él antes de quedarte enganchado cómo yo!!
Si una SA quiebra, ¿le echa una mano el Ayuntamiento?
¡menos mal que no me gusta el fútbol! ¿Qué digo? me da vomitina, de verdad.
Marta G Brea: me alegro de verte por aquí.
En cuanto al tema, creo que es verdad. El problema es que en ciudades con dos equipos de fútbol, si el ayuntamiento ayuda a uno, por coherencia debe ayudar al otro.
Petons.
Jovekovic: no creo que me enganche al fútbol. Sólo a sus consecuencias políticas.
Elèna Casero: si es un club de fútbol, los ayuntamientos sienten la obligación de echarles una mano (¿?)
Mi equipo es el Barca! Veo algunos juegos en vivo en cable por estos lares!
Me sorprendes. La mayor parte de gente que sigue el fútbo, español fuera de España son del Real Madrid.
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