La historia que (casi) se repite

No hace falta que diga que hoy se cumple un año y cinco meses del accidente de metro. Tampoco hace falta que diga que la Asociación de Víctimas del Metro 3 de Julio celebrará hoy a las 19:00 una concentración en la Plaza de la Virgen. Los que leen habitualmente este blog sabéis que el día 3 de cada mes hablo de lo mismo.

Algunos dirán que esto es cosa del pasado, que fue un desgraciado accidente y ya está. Pero no es así.

Este fin de semana pasado, en la primera estación de Benaguasil, descarrilaba un convoy de la Línea 1 del metro que cubría el trayecto entre la Pobla de Vallbona y Llíria. Lo hizo en un tramo en el que habían estado trabajando operarios reparando la vía. Los maquinistas debían reducir a 10 km/h pero ese día las obras habían terminado y los maquinistas podían acelerar hasta 25 km/h.

Sobre las 12:00, el tren descarriló con 40 pasajeros a bordo que no sufrieron daños graves. Al parecer, la causa fue el descarrilamiento de una de las ruedas.

El servicio se restableció a las 20:10, con lo que se estima que se vieron afectados 30 trenes.

El último accidente en la red de metro de Valencia se produjo el pasado 14 de noviembre cuando un vagón de cola de un tranvía descarrilaba al salir de las cocheras ubicadas en Tarongers.

Cabría preguntarse cuándo va a despertar la sociedad valenciana y a darse cuenta de que cualquiera que coja el metro no está a salvo. Si no bastan 43 víctimas, ¿bastarán 86, 100, 200...? La respuesta deberían ser ninguna víctima.

Mientras, ellos pedirán dimisiones cuando el caos ferroviario se produzca en Cataluña, pero ocultarán lo que ocurre en la comunidad que gobiernan.