Supercabrones

Desde Risto Mejide en Operación Triunfo se ha generalizado eso de introducir en los jurados de los reality shows a cabronazos que metan caña a los concursantes. Lo hemos visto en Factor X y lo podemos ver en Supermodelo 2007 (ambos programas de Cuatro). No soy muy seguidor de los realitys (si conozco ambos programas es por esas emisiones de media hora a las 21:45 que atrasaba el comienzo de mis series favoritas hasta las 22:30), por eso puede que no entienda esa moda. Tampoco considero una profesión el desfilar por una pasarela y, aún así, hay mucha gente dispuesta a dejarse la dignidad en el intento.
Pero lo que si que no me entra en la cabeza es esa manía de insultar y regañar a los concursantes como si fueran niños de cinco años que no entienden la lección. Y no me refiero a humillarlos en los concursos propiamente dichos, sino que esta situación se dé también en los cástings.
Una persona va allí, con toda la ilusión del mundo y acaba escaldada por culpa de los insultos recibidos.
Sinceramente, estimo más a una persona que es capaz de decirme diplomáticamente que no valgo para algo que una persona que me lo dice a grito pelado e insinuando que soy demasiado burro y que él (o ella) es superior a mí porque en el concurso cobrará más.