jueves, 28 de julio de 2011
La CAM: otro ejemplo de la política financiera del PP
Tras la fusión de Bancaja con CajaMadrid y otras cajas para formar Bankia, había qué ver qué iba a ser de la otra caja valenciana, la Caja de Ahorro del Mediterráneo (CAM), con sede en Alicante. Al final, ha sido intervenida por el Estado.
La verdad es que se veía venir desde hace unos meses, cuando su fusión con con otras cajas fue abortada debido a la situación de la propia CAM. Entonces ya se rumoreó que iba a ser rescatada con el dinero de todos los españoles. Ahora se ha confirmado ese rescate. Y es que la CAM, al igual que otras cajas, era más escenario de luchas políticas que otra cosa. Y viendo cómo tiene y gestiona el PP la Comunidad Valenciana, la CAM tampoco podía ir bien. No en vano, el nombre de esta caja incluso se ha visto manchado en el escándalo Brugal.
Así, por ejemplo, se ha sabido que, con el consentimiento de la Generalitat, la entidad financiera concedió créditos a un interés del cero por ciento a sus propios consejeros. Entre 2004 y 2010 se concedieron 16 millones entre créditos a sus propios consejeros. En 2008, Modesto Crespo, Manuel Navarro, Gregorio Fernández y Juan Ramón Avilés consiguieron 4,6 millones sin tener que pagar intereses.
Aniceto Benito, expresidente honorario del PP de Alicante y del Hércules, recibió 50 millones en cinco ejercicios diferentes. Y Antonio Magraner, Juan Ramón Avilés y Ginés Pérez Ripoll recibieron grandes cantidades en créditos o descuentos comerciales. Según la memoria de 2010, la CAM mantiene créditos vivos con los consejeros por valor de 114,13 millones de un total de 161 millones en créditos, descuentos y avales concedidos desde 2004. Estos préstamos eran conocidos y autorizados por la Generalitat valenciana, tal como establece la Ley de Cajas de la Comunidad Valenciana, de 1997.
El PP, por supuesto, prefiere ignorar todo esto. Para el nuevo presidente autonómico, Alberto Fabra, esto sólo es "un debate estéril". González Pons le echa la culpa al Banco de España.
Pero lo cierto es que a la CAM le ha podido el peso político y el del ladrillo. La caja se había quedado con 3.200 millones en suelo, pisos y promociones. En 2010, el 22% de los créditos era para asuntos de inmobiliarias y constructoras. La morosidad por estos asuntos era del 9,74%. Más de 1.000 millones fueron créditos a promotores inmobiliarios, muchos de ellos fallidos, como Martinsa, Polaris o El Pocero. Y por acción y gracia del PP, la CAM se vio involucrada en su época en Terra Mítica, un avispero de corrupción y especulación.
Y no sólo se ha embarcado en asuntos inmobiliarios en España. A través de Hansa Urbana ha impulsado 700 millones en proyectos inmobiliarios. El más importante era un complejo turístico en el Caribe mexicano, paralizado por denuncias ecologistas a la UNESCO. Otra de sus filiales emprendió más de un centenar de proyectos que supusieron un capital de 200 millones y 1.700 millones en préstamos en países como España, Portugal, Polonia, Marruecos, México o Costa Rica.
El PP, como ya he señalado antes, llevaba las riendas de esta caja. Tres días antes de su nacionalización, la CAM prestó 200 millones a la Generalitat en forma de pagarés. La operación se llevó a cabo a través del Instituto Valenciano de las Fiananzas (IVF).
Esta es la caja que se va a salvar gracias al dinero de todos los españoles y españolas.
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2 comentarios:
¡Y aún ha tenido González Pons el cinismo de pedir responsabilidades al gobierno de la nación y al Banco de España por no haber intervenido antes! La capacidad de esta gente para mentir y enredar es infinita. Feliz verano, querido amigo.
Ya sabemos lo cínicos que son siempre estos tipos. La culpa nunca es de ellos, sino de los socialistas, por existir.
Feliz verano a ti también.
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