En Periodismo no todo vale

Se mire por dónde se mire, lo sucedido con New of the world es intolerable. En Periodismo no todo vale. La noticia no es lo importante. Lo importante es la gente que se ve involucrada en ellas. Lo malo es que vivimos en un mundo donde la única ética es el dinero.
También podemos decir que vivimos en un mundo dominado por el morbo. Aquí en España tenemos programas del corazón para saciar ese hambre de morbo. En el Reino Unido parece que tienen los tabloides y los diarios sensacionalistas y amarillistas. Hace unos años, a los periodistas británicos les daba por colarse en el palacio de Buckingham (sin que nadie supiese que tenía eso de informativo). Pero parece que el público inglés se cansó de ello. Así que News of the world dio un paso más en la intrascendencia informativo y se decidió a pinchar teléfonos de víctimas de los atentados del 7 de julio de 2005 en Londres (que alguien me explique qué interés informativo tenía el saber si las víctimas lograron o no despedirse de sus seres queridos) o los teléfonos de soldados muertos en Irak y Afganistán. Incluso pincharon el teléfono de una niña desaparecida y borraron algunos mensajes, haciendo creer a los padres que los había borrado ella, para darles falsas esperanzas y hacerles creer que seguía viva.
En el escándalo, además, se ha visto salpicado un exjefe de prensa de David Cameron, quien lo contrató a pesar de los escándalos que ya pesaban sobre él. Periodismo y política dándose la mano, con métodos igual de rastreros. Algo funciona muy mal cuando la falta de ética domina cualquier faceta de la sociedad hacia la que miremos. Ya sea pinchar el teléfono de víctimas, inventarse una conspiración terrorista o criticar a ministras por su cuerpo, los medios de comunicación también necesitan un lavado urgente.