miércoles, 23 de marzo de 2011

"Vacunas contra la corrupción: compromiso de transparencia y compromiso de participación"

Inicio con esta una serie de entrevistas (que no sé cuánto durará) a los candidatos a la alcaldía de Valencia y la Generalitat de todos los partidos políticos (los que respondan positivamente a mi solicitud). La primera entrevista es la que publico ahora, a Joan Ribó, candidato a la alcaldía de Valencia por la coalición Compromís:

Kurtz: ¿Qué puede ofrecer Compromís que no ofrezcan el resto de partidos?

Joan Ribó: Compromís quiere ofrecer, e primer lugar, una visión de proximidad. Somos gente como la gente normal, que trabajamos en política. Nos hemos comprometido con esta ciudad y queremos dar esa idea de proximidad. Somos gente que va en bicicleta, que vamos en autobús, que a veces vamos en coche, y a veces andamos por la ciudad. Primera idea que queremos resaltar: no somos gente que nos guste los coches oficiales.
Nos gusta una ciudad en la que se pueda vivir y en la que poder disfrutar. ¿Esto qué quiere decir? Pues quiere decir, una ciudad que tenga unos servicios. Y por eso queremos trabajar, por unos servicios básicos fundamentales, como la Enseñanza, como la Sanidad, o como la atención a los mayores.
Somos unas personas que pensamos desde unos criterios muy de defensa del Medio Ambiente. Y eso, aplicado a la ciudad, tiene muchísimas connotaciones. Por ejemplo, desde los problemas de movilidad, somos personas que nos gusta más el andar que el ir en coche, el ir en bici que el ir en coche, el transporte público que el coche particular, reconociendo que todos ellos deben tener cabida en la ciudad; no tiene que haber un rey y señor como hay ahora, que es el coche. Por lo tanto, nuestra visión de la ciudad es una visión muy distinta de la del Gobierno actual, es una visión de hacer una ciudad en la cual toda la movilidad esté basada en una movilidad de carácter sostenible.
Somos gente que pensamos que no hay que construir, hay que rehabilitar. Y esa, para nosotros, es una idea fuerza muy importante. La ciudad no tiene por qué crecer indefinidamente. La ciudad lo que tiene que hace es mejorar su cualidad, conservar el patrimonio histórico, su patrimonio cultural, su patrimonio urbanístico, su patrimonio como barrios, como El Cabanyal o Russafa o el resto de barrios. ¿Qué es lo que hay que hacer en estos momentos? Estoy pensando también en problemas de trabajo; a la gente que se ha dedicado a la construcción hay que dedicarla a la rehabilitación de las viviendas para lanzarlas al mercado de alquiler, para que sean viviendas que consuman menos energía, que estén más adecuadas al sonido, que se pueda vivir en ellas, que se puedan alquilar para personas jóvenes. Somos gente que pensamos mucho en la sostenibilidad de la ciudad. Enlazando con eso, también estamos convencidos de que las viviendas pueden ser unos agentes de mejora de la sostenibilidad de la ciudad de forma importante.
Somos gente que nos gusta nuestra cultura y nuestra lengua. Por eso queremos, en primer lugar, que se cumpla lo que está escrito en los reglamentos, pero apostando por que Valencia tiene que ser un referente cultural importante en la música, en la producción audiovisual, en la producción de comunicación; todo eso genera muchos puestos de trabajo, y estamos pensando también en eso.
Somos personas que nos gusta una ciudad que sea una avanzada en ciencia, en desarrollo de conocimiento, y en todos estos aspectos. Pensamos en una ciudad moderna, en una ciudad 2.0, un lugar donde haya muchos parques y muchos parques donde te puedes conectar con tu netbook o porque tienes WiFi, una ciudad que busca tener un software libre; una ciudad que avanza a ese nivel.
Y somos gente que, por supuesto, quiere defender lo que tiene de Medio Ambiente válido. Y ahí pensamos en tres cosas: la playa, la Albufera y la huerta. Son tres elementos de defensa y eso tiene muchísimas traducciones. En la playa, estoy pensando que el movimiento de tierras del puerto se está comiendo las playas del sur, pero también estoy pensando que hay que limpiar las playas del norte. En la Albufera se necesita una mayor protección, y en la huerta, no te digo; es un elemento muy claro.
Y somos gente que pensamos que Valencia debe ser la capital del País Valenciano. Valencia no puede seguir siendo un "ordeno y mando" y hago lo que me da la gana, sino que debe llegar a acuerdos con los municipios de su alrededor, tiene que buscar planteamientos de área de toda la comarca a todos los niveles, y tiene que ser de alguna manera un polo atrayente de todo el País Valenciano. Mucha gente dice que Valencia está de espaldas a todo su territorio; nosotros creemos que debe ser una capital amable para todo su territorio.
Y por supuesto, somos gente que pensamos que Valencia ha de ser una ciudad culta. Que tenga museos, y que esos museos estén ocupados. Estoy pensando en el Museo de las Ciencias, por ejemplo. Evidentemente, nos parece muy bien que tenga Palacios de la Música, Palacios de las Artes, pero que no estén vacíos, sino que se estén utilizando; que tengan los museos entrelazados y de calidad. Si tiene, por ejemplo, grandes eventos como lo de Ágora, que no sea una cosa donde solamente se utiliza para Open de tenis, que debería llamarse Close de tenis. Es decir, que se utilicen las cosas que tenemos. Realmente tenemos una ciudad para ver, pero no para disfrutar.

Kurtz: ¿Cuáles piensa que son los problemas que tiene actualmente la ciudad de Valencia?

Joan Ribó: La ciudad de Valencia tiene muchos problemas, pero tiene uno gravísimo: que tiene 60.000 parados. Y ese problema es el primer problema frente al cual el ayuntamiento no está haciendo prácticamente nada. Por eso, nosotros hablábamos de rehabilitar para dar faena a todo el mundo de la fontanería, de la construcción, etcétera. Por eso estábamos hablando de mejorar la sostenibilidad de todas las viviendas, porque estamos pensando que eso desarrolla puestos de trabajo. Me gusta mucho comparar siempre Navarra con el País Valenciano. Porque Navarra, que es una comunidad también gobernada por la derecha, al mismo tiempo es una comunidad que quiere tener energía renovable al cien por cien para el 2020. Eso Valencia no se lo plantea. Hay una cosa a destacar: En Valencia tenemos el 20% de paro y en Navarra el 10%. Hay una relación causa-efecto. Yo quiero resaltar todo lo del empleo verde. Valencia es una ciudad que no respeta su huerta. Mucho hortelano en Fallas, pero luego no lo tiene en cuenta. Valencia es una ciudad que hace muy poco por potenciar toda la investigación y el desarrollo, todo el conocimiento como fuerza productiva, podríamos decir. Yo creo que estos elementos son los fundamentales.
Y Valencia ha de ser una ciudad sostenible. Valencia tiene muchos signos de insostenibilidad. Por ejemplo, tenemos muchos continentes y pocos contenidos. Pero también hay otros temas, por ejemplo, la iluminación. Un valenciano, tú, yo, consumimos más de doble de iluminación que un madrileño, y camino del triple que un barcelonés. Y claro, ¿eso para qué lo consumimos? Para derrocharlo. Porque normalmente, los seres humanos vamos por el suelo, no vamos volando como los pájaros. Pues aquí, la mitad de la luz se va. Valencia es una ciudad derrochadora, en muchos aspectos. Luego no tenemos para recursos fundamentales como el colegio de nuestros hijos, el centro de salud, o la atención a las personas dependientes. Valencia es una ciudad que gasta muchos recursos y millones al año, por ejemplo, en derruir casas en El Cabanyal, y no gasta ni un duro en rehabilitar casas en El Cabanyal, que sería mucho más barato, mucho más rápido y mucho más eficiente. Por eso somos derrochadores. No sabemos utilizar adecuadamente nuestros recursos.
Por lo tanto, primer tema, el tema del trabajo. Y muy vinculado a él, la sostenibilidad en un sentido genérico. Porque las dos cosas van cada vez más estrechamente ligadas. Reitero Navarra como comunidad sostenible, y la Comunidad Valenciana como comunidad insostenible. 10% de paro; 20% de paro.

Kurtz: Entonces, ¿la solución que propondríais para el tema del paro sería apostar por la sostenibilidad?

Joan Ribó: Eso se llama Green New Deal, ese es nuestro planteamiento. No nos lo hemos inventado, es el eslogan del Partido Verde Europeo, con el cual tenemos nuestras vinculaciones. De hecho, estuvo aquí el sábado pasado Mónica Frassoni, la presidenta.
Por eso pensamos que la manera de encontrar trabajo la gente no es invertir en nucleares, sino invertir en renovables. o es invertir en traer agua del Ebro, es invertir en ahorro y en tapar agujeros. No es invertir en consumir más energía, es invertir en más energía renovable, en poner agua caliente en los tejados, células fotovoltaicas, etcétera. Y así podríamos seguir con muchísimas cosas.

Kurtz: Voy a nombrar una serie de problemas más concretos, y dígame lo que piensa o las soluciones que propondría.
El accidente del metro y las reivindicaciones de las víctimas:

Joan Ribó: Lo primero que ha de pasar con el metro es que no se repita. Por lo tanto, medidas de seguridad que se han instalado en prácticamente todos los metros del mundo, o al menos se han desarrollado, ponerlas ya. Había un compromiso de hace muchos años y están cumpliendo. El ATO, por ejemplo, sigue sin funcionar.
Segundo punto. Las víctimas del metro tienen su dignidad. El presidente tiene que recibirlas y darles un trato adecuado. No se puede hacer un monumento ahí y segregarlo. Que pongan una placa, como mínimo. Hay que buscar una rehabilitación de estas personas. Han sido tratados como apestados, y hay que tratarlos con dignidad, como se merecen, como las víctimas de cualquier atentado terrorista. Estas personas han sufrido un accidente por unos motivos determinados y creo que necesitan una reparación comparable a la que tienen las víctimas del terrorismo de ETA o de cualquier otro. Por lo tanto, merecen un mínimo de consideración. Que sean recibidos por quien corresponde, y necesitan tener una serie de elementos que ellos reclaman, como mínimo. Que se recuerde. Tienen derecho al recuerdo. La derecha española tiene la manía de querer borrar hasta el recuerdo de la gente, como hizo Franco en su momento. Parece como si lo estuviéramos repitiendo.

Kurtz: Sobre el tema de la corrupción, que aquí en Valencia también nos afecta con casos como el Nuevo Mestalla o Pinedo...

Joan Ribó: Hay casos muy claros como el tema de Pinedo, o la visita del Papa, pero hay otro por ahí que están tapados por un muro. ¿Qué hay que hacer con estos casos? Yo creo que la gran vacuna es, evidentemente, llevar a los corruptos a los juzgados. Rápidamente juzgarlos y condenarlos.
Hay otras dos vacunas: Uno, transparencia. Compromiso, y es un compromiso fuerte de nuestra coalición, de poner paredes de cristal. Quien quiera una factura, tiene derecho a verla, sea de la visita del Papa o de la Fundación  CEyD. Tenemos unos mecanismos de opacidad en el ayuntamiento y en la Generalitat realmente escandalosos. "No se lo enseño porque no me da la gana".
Segundo planteamiento: Participación. Si determinadas decisiones se tomaran de forma abierta, en vez de en sitios cerrados, automáticamente las posibilidades de corrupción disminuirían muchísimo.
Por lo tanto, a los corruptos, castigo. Y vacunas contra la corrupción: compromiso de transparencia y compromiso de participación.

Kurtz: Con respecto al Cabanyal, ¿qué proponen?...

Joan Ribó: Primero, que no continúen derribando casas. Segundo, un compromiso de rehabilitación. Los recursos que se están dedicando a tirar casas y a comprar, dedicarlos a rehabilitar. Evidentemente, generaríamos muchísimos más puestos de trabajo y generaríamos muchas más oportunidades de negocio.
Y tercera idea que nosotros llevamos explícita en el programa: si miramos El Cabanyal hay una cosa muy clara, es el barrio que está más cerca del Politécnico y del campus de Tarongers. Por lo tanto, El Cabanyal es un sitio ideal como residencia de alumnos, como residencia de Erasmus. El Cabanyal debería ser un distrito avanzado en nuevas tecnologías; trabajar en esa dirección nos parece claro.
Evidentemente, hay otro aspecto del Cabanyal. El Cabanyal es una de las playas de Valencia. El Cabanyal no sólo tiene problemas por un lado; también los tiene por su conexión al mar, que hay una serie de zonas muertas, que según muchos arquietectos, hay que rehabilitar, ordenar, construir, en muchos casos, para que El Cabanyal sea la playa de la ciudad, Cabanyal-Malvarrosa. Y hay un aspecto colateral importante: esas aguas no deben seguir siendo contaminadas por un emisario submarino, como la acequia de Vera, que está contaminando estas aguas y les impide tener Bandera Azul.
Por tanto, yo creo que El Cabanyal, primero, no se debe seguir destruyendo. Segundo, hay que aprovechar todo su potencial urbanístico como un atractivo turístico. Tercero, hay que aprovechar su proximidad a las universidades como residencia para romper rápidamente todos los mecanismos de degeneración. También como barrio tecnológicamente avanzado. Y cuarto, hay que pensar que El Cabanyal o la Malvarrosa, no estoy hablando sólo del Cabanyal, son barrios que están al lado del mar, por lo que potencia el turismo de playa de forma importante, y hay que saber aprovecharlo.

Kurtz: Con respecto a la Sanidad pública...

Joan Ribó: Yo creo que el tema de la Sanidad pública está claro. Lo primero que hay que hacer es los centros de salud en todos los barrios. Hay una serie de barrios que siguen sin tener centros de salud. Los centros de salud, cuando están construidos, y están funcionando, suelen funcionar bien, y suelen tener un grado de satisfacción importante. Podemos decir lo mismo de los hospitales. ¿Dónde está la insatisfacción fundamental? En la lista de espera, por un lado. Faltan plazas. Sobre todo en los centros de especialidades, que son un cuello de botella donde se generan muchos problemas. Yo creo que habría que emprender una reorganización de los centros de especialidades para que fueran reabsorbidos por los centros de salud, aquellas cosas que se puedan, y aquellas cosas más específicas por los hospitales. Nosotros pensamos que el centro de especialidades es un resquicio del pasado.
Con respecto al hosptal de La Fe, está hecho con mucha prisa. Es algo electoralista, el querer inaugurarlo antes de las elecciones, y están apareciendo problemas muy graves de todo tipo. El más claro hasta ahora es la pérdida del Hospital Infantil de La Fe, que en el nuevo centro no existe. Pero la improvisación, el no haber terminado las obras, el tener fallos garrafales como que los pasillos eternos de aquel centro no se pueda apagar la luz... Hay una cantidad de problemas que dices: "No puede ser, no tiene sentido". Otro elemento importante, que lo vamos a notar, es la pérdida de camas. Las camas de la Nueva Fe son aproximadamente la mitad de las que había antes, con lo cual, vamos a tener problemas serios. Habría que defender el viejo hospital La Fe como algo que no se debe perder, como un centro que, de alguna manera, debería cumplir una serie de funciones. No soy yo especialista en Sanidad, pero sí que hay allí un espacio, una construcción, que adecuadamente rehabilitada debería ser aprovechada. Porque nuestra comunidad tiene muy pocas plazas de hospital, muy pocas camas por cada mil habitantes. Estábamos en la cola hasta hace muy poco tiempo. Y me temo que seguimos en la cola. Por lo tanto, no podemos perder este hospital. Uno tiene, a veces, la sensación de que alguien está pensando en la privatización de la Sanidad y va disminuyendo camas para que la gente vaya a los nuevos hospitales.

Kurtz: ¿Y en el tema de Educación?

Joan Ribó: En el tema de Educación, desde el ayuntamiento, hay una primera cosa que hay que hacer: los terrenos que son para Educación que sigan siendo para Educación. Lo digo por lo del terreno de Campanar que lo han trasladado de un terreno que estaba marcado como terreno de Educación General y se lo han cedido a la Univerisdad Católica.
La segunda cosa que hay que hacer es centros en la ciudad. No se puede hacer lo que se ha hecho en Russafa, o en otros barrios. Te dicen: "Sí que hay plazas en la ciudad; vaya usted a ese otro barrio", y los niños desplazándose por la ciudad enloquecidamente. Muchos centros de Valencia, además, son viejos. Nuestro planteamiento es muy normal. Hacer centros. Cuando se diseña un barrio nuevo, hay que tener planificado un centro. Así de sencillo. Es muy normal. Cada determinado espacio hay que hacer un centro de Primaria, y otro de Secundaria. Está escrito sobre el papel, pero no se cumple. Casi me atrevería a decir: "Que se cmplan las leyes por el bien común". Hay que hacer los centros con un tamaño suficiente, hay terrenos suficientes si el ayuntamiento no quiere venderlos o usarlos para otras cosas. Y luego, la Generalitat tiene la obligación de hacerlo. concretamente en Russafa hay un solar cedido desde hace muchos años y la Generalitat no hace el centro. En parte porque quiere que la gente se vaya a la privada, descaradamente.
En el tema de las universidades, evidentemente, no entramos en el aspecto educativo. Pero nos interesa su relación con la ciudad. La universidad debe ser un motor de generación, de producción, de conocimiento. El conocimiento, cada vez más, es una fuerza productiva. Cuando hablamos de paro, estamos hablando de mucho paro en todas las profesiones, desde ingenieron de telecomunicaciones hasta profesores de EGB, de instituto, periodistas, etcétera. Lo que nos interesa es que las universidades, junto con el ayuntamiento, generen vectores, como los generan en otras ciudades como Barcelona, y barrios tecnológicamente avanzados, y que la ciudad deslumbre en algo más que en tener muchos coches que corren mucho. La relación con la universidad nos parece prioritario. De hecho, mañana me reúno con el rector de la Politécnica, y ya estuvimos con el de la de Valencia, porque nos interesa mantener una relación fluida y preguntarnos "¿Cómo podemos, desde el ayuntamiento, ayudar a que la universidad sea un centro como son las universidades chinas o estadounidenses, de proyección de patentes de producción y generación de conocimiento y que genere puestos de trabajo?" Hay muchas líneas ahí, desde las energías renovables hasta el urbanismo. Por ejemplo, a nosotros nos interesa saber la opinión de la universidad en tema de urbanismo, más allá del estudio pagado que diga que los del Cabanyal se puede hacer (por poner un ejemplo). Por eso, la relación con la universidad es muy importante, para nosotros.
Nos interesa también una universidad que en el mundo de la cultura tire hacia adelante y haga de Valencia una capital cultural. Nos interesa una universidad que tenga una producción a nivel de comunicación muy importante. Eso es determinante para la ciudad. Aun que ellos se entienden con la Generalitat, están aquí, y por lo tanto hemos de tener unas relaciones para que ellos puedan trabajar, y nosotros podamos ayudarles e incentivarles y que generen mecanismos de conocimiento y producción.

Kurtz: Con respecto al caso concreto de la subestación de Patraix. ¿Qué opinión tiene?

Joan Ribó: Yo creo que nos están tomando el pelo. La subestación de Patraix, en estos momentos, está parada. Pero siempre, en las subestaciones de una ciudad, si están funcionando X, tiene que haber X+1 por si falla una. La de Patraix es la subestación de reserva para cuando hay un problema en alguna otra subestación. Yo me creeré que lo de la subestación de Patraix no funciona, que la van a cambiar, cuando vea algún movimiento en su traslado. No veo ningún movimiento. Yo tengo la sospecha de que en el momento en que el consumo energético aumente, que espero que no pase, la subestación de Patraix se pondría en marcha.
Nosotros este tema lo englobamos en un marco más amplio, y es en el tema de la contaminación electromagnética. Está la subestación de Patraix, pero también están las antenas de telefonía móvil. Nosotros defendemos que se cree un reglamento y se haga un control a tosas las empresas porque las empresas a todos los niveles, desde operadoras de telefonía móvil hasta Iberdrola, campan a sus anchas, sin ningún respeto a las normas y hacen lo que les da la gana. A todas estas empresas hay que decirles que hay que cumplir las normas y hay que cumplir unos mínimos. Evidentemente, en el caso de la subestación de Patraix, esos máximos pasan por trasladar la subestación fuera de núcleos directamente habitados.

Kurtz: Hace poco se creó el servicio de Valenbisi [alquiler de bicis]. ¿Creen que es suficiente o presenta deficiencias?

Joan Ribó: Valenbisi yo creo que es un acierto. Hay que reconocer que el ayuntamiento, copiándose de ciudades como Barcelona, Sevilla y otras ciudades, ha implantado el alquiler de bicicletas, y lo que es significativo es que ha tenido un éxito rápido y contundente. Eso es una parte positiva. Sería bueno ver los contratos que, de momento, no están a nuestro alcance y el ayuntamiento no es muy transparente. ¿Qué falla en Valenbisi? Yo creo que el problema fundamental de Valenbisi, salvo algún momento determinado por algún problema informático, los problemas de Valenbisi son por falta de movilidad. Tendrían que haber desplazamientos de bicicletas durante el día como se hace en otras ciudades; yo lo he visto en Barcelona, porque te puedes encontrar todas las bicicletas en la universidad y en las zonas ninguna, o al revés. Durante el día hay que mover esas bicicletas. ¿Cuál es el problema fundamental? El problema fundamental no es de Valenbisi, es de la bicicleta en Valencia. En Valencia no se ha hecho una apuesta a nivel de carril bici, a nivel de vías ciclistas. Tú vas por tu carril y te encuentras con un letrero que dice: "Final de carril". ¿Y ahora qué hago? ¿Me busco la vida? ¿Me peleo con los peatones que son un poco más pequeños que yo o e peleo con el todoterreno que es más grande que yo? Y entramos en conflicto. Lo que hay que hacer es plantearse que el ir en bici es una opción como ir en coche o como andar o como usar el transporte público. Las calles no son solo de los coches. Tiene que haber calles especiales, tramos especiales, vías especiales; por eso, por ejemplo, pedimos que hubiera una vía ciclista en las Grandes Vías en un sentido y en otro. Eso es una asignatura pendiente en la ciudad. Mientras esto no se resuelva, vas andando pacíficamente y al volver la esquina te encuentras a dos de Valenbisi despistados que casi te pisan. Pero no es culpa suya, pues no pueden ir por otro lado. El problema es de una inadecuada gestión del uso de la bicicleta en la ciudad hacia los que usamos Valenbisi o a los que tenemos bici. No sabemos por dónde ir, o vamos en carriles bici tan estrechos que si vamos dos juntos, vamos pegándonos, o directamente sin carril bici. Puedes apostar para que te maten o intentar sortear a los peatones. No está adecuadamente gestionado.

Kurtz: Sobre la política de Grandes Eventos, ¿cuál es vuestra opinión?

Joan Ribó: Está claro, los Grandes Eventos hay que pararlos. Ya está bien. Y lo que hay que hacer es aprovechar lo que tenemos. Me explico: por ejemplo, nosotros tenemos un Ágora, que nos ha costado muchos millones, que los hemos pagado, y se tiene que utilizar. Lo que tenemos hecho, lo tenemos que aprovechar. Y me parece muy bien que vengan unos señores a jugar al tenis. Pero eso dura una semana. Entretanto, hay artistas de teatro que no tienen un sitio donde ir, hay músicos que no saben dónde actuar, hay posibilidades musicales que se podrían desarrollar. Utilicemos las cosas. En el caso de la Fórmula 1, es probable que Barcelona deje de organizar su campeonato porque el coste es excesivo, y es más barato que Valencia. Yo tengo la sensación de que la medida rentabilidad-precio no es adecuada. Tengo la sensación de que no ganamos, perdemos. Mi obsesión en estos momentos es, "dejémonos de tantos eventos y utilicemos lo que tenemos". Por ejemplo, el Gran Evento que tenemos en la ciudad son las Fallas, no es otro. Es lo que da vida a la ciudad. Sepamos gestionar adecuadamente las Fallas para potenciarlas, para alimentar su carácter cultural. Tenemos ese Gran Evento. Otro ejemplo, sepamos utilizar el Palacio de las Artes, que de cuatro salas que tiene, tres están permanentemente cerradas. Nos han costado centenares de millones de euros. Y podríamos seguir así con otros ejemplos. Si mejoráramos un poco la calidad del Museo de las Ciencias tampoco pasaría nada. Y lo digo suavecito para que se me entienda. Y podríamos decir lo mismo de la mayoría de museos. Gestionemos bien lo que tenemos porque yo creo que es la base de un turismo sostenido en el tiempo. Un evento crea una punta de dos días y luego te mueres de hambre. Si tú gestionas lo que tienes adecuadamente, como hacen otras ciudades, como Barcelona o Madrid de alguna manera, gestionando continuamente grandes actos culturales, que no gastas tanto dinero, pero vas a tener visitantes a lo largo del tiempo. Yo tengo claro que una ciudad como Valencia necesita proyectarse al mundo. Pero tenemos que hacerlo de la manera más barata posible y más efectiva posible. Y estoy convencido de que los eventos no son la más barata ni la más efectiva de las formas.

Kurtz: Ha comentado la Fórmula 1 como uno de los Grandes Eventos. Hay muchos pilotos de Fórmula 1 que han alabado el circuito de Cheste. ¿no sería bueno trasladar el Gran Premio de Fórmula 1 de Valencia al circuito de Cheste?

Joan Ribó: Ese es el tema que nosotros defendimos. Nosotros podemos entender que haya gente que le gusten los coches. a mí no me gustan, tengo la manía de la bici, pero vale. Pero en Cheste tenemos un circuito donde corren las motos, lo adaptamos, lo modificamos para coches y no tienes que plantearte los costes, que son costes importantes para los barrios, a nivel de contaminación acústica, por ejemplo. Creo que no tiene mucho sentido.

Kurtz: Antes también ha comentado el tema de los trasvases de agua. ¿Cuál es su apuesta: los trasvases o las desaladoras?

Joan Ribó: La primera cosa que hay que decir es que por trasvases no se puede apostar porque es imposible. Es decir, hoy no tendrías nunca la financiación necesaria para hacer un trasvase del Ebro. Y segundo, hoy tendrías todos los problemas del mundo para planteártelo. Esa opción, hoy, no es posible.
Segunda cosa. ¿Por qué opción apostamos? Apostamos, sobre todo, por una nueva cultura del agua. Quiere decir esto que vamos a gastar menos. ¿Cómo es posible que los valencianos, que nos falta agua, gastemos más que el promedio de España? Nosotros nos planteamos la gestión de la demanda. Es un poco lo mismo que la luz. ¿Para vivir en una ciudad se necesita gastar el doble que en Madrid? Puedes gastar menos luz, verte igual de bien y que te cueste menos. Aquí, en el tema del agua, pasa un poco lo mismo. Tapas los agujeros de las cañerías... Yo he visto datos de cañerías en Castellón con pérdidas en cañerías del 40%. Tapar esas cañerías cuesta puestos de trabajo, pero si nos sobran puestos de trabajo. Y es más barato que traer el agua de otro lugar. Además, hay que reutilizar el agua, depurarla para usarla. Esto también cuesta puestos de trabajo. Pero claro, a cambio tienes que tú puedes utilizar estas aguas adecuadamente.
Tercero. ¿Puede haber años punto con grades sequías? Sí. Pues entonces utilicemos de esa agua.
Pero insisto. Antes de hablar de trasvases o desaladoras, hablemos de una utilización racional del agua. No es racional, por ejemplo, ver que se riegan olivos. Es no es lógico.

Kurtz: Cuándo se habla de manipulación, por ejemplo, se habla de cómo el ayuntamiento utiliza recursos públicos para actos del partido, ¿desde Compromís que pensáis de esto?

Joan Ribó: Eso de "El Estado soy yo" lo decía un señor, y luego poco después, vino la Revolución Francesa. Por lo que eso ya está muy viejo.
Segundo tema: El confundir el Gobierno con el partido es un mecanismo típico de las dictaduras del este de Europa. También se ha quedado muy antiguo. Yo creo que hay que tener un cuidado exquisito, en primer lugar, por seguridad del propio partido, en que eso se tiene que separar. Pero cuando vemos determinadas, tenemos la sensación de que el dinero de las campañas se hacen con contratos como ha pasado en los casos Brugal o Gürtel. Estos casos no son la excepción. Tenemos la sensación y la convicción de que son la regla. Ha pasado una cosa muy curiosa: cuando ha gobernado la Oposición en Mallorca, hemos visto cómo han saltado por los aires casos muy claros, como el caso Palma Arena que implica al expresidente del Gobierno balear. Yo creo que aquí pasa lo mismo. Volvemos a lo de antes: transparencia y participación. si tú los recursos los dedicas no a lo que quieres, sino a lo que te pide la gente, es muy difícil que puedas hacer eso. Si tú tienes un compromiso jurídico o legal de que tienes que dar todos los papeles, es muy difícil que puedas hacer todo eso. Aunque ellos son muy expertos. Yo creo que cuando les daban el biberón, ya les enseñaban cómo tenían que hacer estas cosas. La derecha española siempre ha sido un poco así. Pero el mecanismo pasa por separar totalmente Gobierno y partido. Yo estoy convencido de que todas las campañas electorales utilizan ese mecanismo, tengo la convicción. Si ves una serie de cosas, todo te lleva al mismo sitio. No tienes los datos para poder demostrarlo. Pero han aparecido algunas cosas que ya parece todo demasiado descarado.

Kurtz: Con respecto a la cantidad de fundaciones y empresas públicas, algunas de ellas dependientes del ayuntamiento de Valencia, ¿hay que reducirlas o mantenerlas?

Joan Ribó: Hay algunas que, sencillamente, hay que cerrarlas porque son chiringuitos para enchufados del PP y para hacer contratos extraños. Hay casos clarísimos. El caso de la Fundación de Turismo habría que analizarlo en profundidad. Y habría que hacer otra cosa importante: habría que dar participación a la Federación de Empresas de Hostelería y a los sindicatos para que estuvieran representados. Me parece que es importante una gestión adecuada del turismo en Valencia, empezando porque Valencia tenga una denominación propia. Esto lo tendría que hacer esta fundación, y no lo hace adecuadamente; se dedica a una serie de cosas muy raras. Y está también el caso de la Feria de Muestras, que preside la alcaldesa. Y eso puede saltar cualquier día.

Kurtz: Hablando antes de la manipulación, y enlazándola con la manipulación informativa, se suele hablar mucho de Canal 9, pero se ignora otra televisión pública como la Televisión Municipal de Valencia (TMV), que depende del ayuntamiento, ¿hay que "limpiar" esa cadena?

Joan Ribó: En primer lugar, hay que señalar que esta cadena se le ha dado en concesión a una empresa privada. Habría que recuperar la concesión, o de lo contrario, habría que introducir una serie de normas claras. Por ejemplo, la primera, habría que retransmitir los plenos del ayuntamiento. Porque la gente se daría cuenta de lo cutres que son, por decirlo de alguna manera rápida. Eso se hace en muchísimos municipios y sería bueno hacerlo también en la Televisión Municipal de Valencia.
En segundo lugar, hay que potenciar nuestra lengua y nuestra cultura. Hay que dar cabida a todos. Hay experiencias de televisiones por todo el mundo: la BBC, las cadenas francesas, las públicas italianas, la misma Televisión Española, que yo creo que tiene elementos de pluralidad claros. Por desgracia, los modos de entender la televisión de los señores del Partido Popular son goebbelianos, que recuerdan claramente al ministro Goebbels.

4 comentarios:

Andros dijo...

Felicidades por la entrevista.

Kurtz dijo...

Gracias.

Rosa GdeM dijo...

Sigue así.

Kurtz dijo...

Gracias, Rosa.
Un abrazo y mucho ánimo.