jueves, 22 de octubre de 2009

Violencia en Río de Janeiro

De repente, el mundo ha descubierto que en Río de Janeiro hay violencia. Y de la buena. De esa que derriba helicópteros de la policía y todo.
Y sus imágenes han dado la vuelta al mundo. Ahora que Río de Janeiro celebrará los Juegos Olímpicos de 2016.
Combates entre bandas de narcotraficantes, entre bandas y policías... todo ello en ese ambiente marginal de las favelas. Es entonces cuando nos damos cuenta de que existe un país llamado Brasil, al que se le ha concedido la organización de unos Juegos Olímpicos que podrían acabar como los de Múnich.
Y quizá sea ahora cuando se ponga una solución a ese problema, aunque sea de cara al público, aunque sea sólo un primer grano de arena para esa solución.
Y a mí se me ocurre que los Juegos Olímpicos del 2020 se celebren (lo siento por Madrid) en el Congo o en algún otro país de África central. Quizá así descubramos la miseria, el hambre y las enfermedades que azotan esos países y nos escandalicemos un poco más, lo suficiente para clamar por una solución.

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