Si hace unos días hablaba de Jorge Bellver y su protección del patrimonio, hoy les toca el turno a Francisco Camps y Rita Barberá. Y es que los dos han decidido presentar una querella contra la ministra de Cultura, Ángeles González Sinde, por prevaricación al detener los derribos del Cabanyal (para una cosa que hace bien la ministra). y todo ello, a pesar de que hasta el Tribunal Constitucional respaldó la prohibición de derribos en el barrio.
La querella, que acabaremos pagando todos los valencianos y valencianas como ya ha pasado otras veces, se basa en un dictamen que la Generalitat y el ayuntamiento de Valencia encargaron a Santiago Muñoz Machado, catedrático de Derecho Administrativo de la Universidad Complutense de Madrid, en torno a la orden ministerial que prohibía los derribos. Según este catedrático, "la decisión ministerial incurre en una incoherencia que la hace irracional y arbitraria", y sostiene que al declarar la ilegalidad del plan Especial de Protección y de Reforma Interior (PEPRI) del Cabanyal, el ministerio sigue "un fin torcido" fruto de "una manifestación de la voluntad particular".
Por tanto, podemos afirmar que el PP valenciano sigue empeñado en "reformar" (donde dice "reformar", hay que decir "destruir") el barrio histórico del Cabanyal. Y no me cabe ninguna duda de que al final lo conseguirán. Aunque tengan que pasar por encima de todos los jueces. Luego, ya nos lamentaremos por no ir a votar.
viernes, 21 de enero de 2011
Camps y Barberá siguen protegiendo el patrimonio valenciano
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