Las prisas no son buenas

Querida Rita Barberá (ya sabes que lo de "querida" es pura formalidad, y perdón por tutearte):
Las prisas no son buenas. Inaugurar cosas antes de las elecciones no es garantía ni de buen gobierno, ni de que funcione. Lo digo porque desde que fue inaugurada la ampliación de la Línea 5 hasta el aeropuerto la semana pasada, ya se han producido cuatro incidentes, el último ayer, cuando un vagón se detuvo en el Marítimo. El primero, veinticuatro horas después de haberse inaugurado. Me "alegro" de que los ricos tengan que sufrir en el metro lo mismo que sufrimos los pobres (en todos los sentidos) de la Línea 1. Pero, ¿no puedes hacer algo bien aunque sea una vez en tu vida? No tendré que recordarte el sobrecoste que ha supuesto para el bolsillo público valenciano el arreglar todos los desperfectos que sufre el Palau de les Arts por no hacerlo bien a la primera.
Por cierto, un pequeño dato por si sigues diciendo que el metro es seguro: en el último año los incidentes se han duplicado. Nada conseguirás negando la realidad.