viernes, 30 de diciembre de 2011

¿Quién es Esther Pallardó?



(¿Alguien sabría señalar a Esther Pallardó en esta fotografía?)

Recientemente, Esther Pallardó ha sido nombrada vicepresidenta de la Diputación de Castellón. Un nombramiento impuesto por Carlos Fabra, quien a pesar de no ser ya el presidente de la Diputación, sigue teniendo un poder que ya quisiera para sí Vito Corleone. Y es que resulta que Carlos Fabra y Esther Pallardó son pareja sentimental.
La carrera de Esther Pallardó ha sido tan meteórica en tan poco tiempo, que muchos la conocen como La Presidenta. Este rápido ascenso le ha hecho ganarse muchos enemigos que esperan ansiosos la caída de Fabra para que ella caiga detrás. Pero parece que Fabra aún sigue conservando mucho poder, y es quien impuso el nombramiento de Pallardó a Javier Moliner, su sucesor al frente de la Diputación de Castellón, quien parece que prefería haber nombrado a alguien de su confianza. Pallardó asume ahora la cuarta vicepresidencia (¿necesita Castellón cuatro vicepresidencias?), sin competencias (salvo la de Acción Social, que ya la ejercía antes Pallardó) y cobrando más de 65.000 euros. Pallardó sustituye a Vicente Aparici, quien era vicepresidente tercero, y que se marcha al Senado.
Pero analicemos la carrera de Esther Pallardó y veamos si le han dado el puesto por algo más que ser la novia de Carlos Fabra. Esther Pallardó era periodista de profesión cuando hace ocho años entró como jefa de prensa en la Diputación de Castellón. Curiosamente, antes había trabajado en el diario Levante-EMV en su edición para Castellón, donde firmó algunas noticias críticas con el PP. La entrada de Pallardó en la Diputación coincidió, prácticamente, con el estallido del caso Fabra (cómo pasa el tiempo, ¿eh?). Pallardó se convirtió en un escudo para Fabra, y en una defensora que le ofreció todo su apoyo y comprensión. A pesar de la diferencia de edad entre ambos, unos treinta años, surgió el amor y comenzaron una relación que aún dura hoy. Y eso que Carlos Fabra ha tenido algún roce familiar, como la animadversión existente entre Esther Pallardó y Andrea Fabra, hija mayor de Carlos Fabra y diputada nacional.
Volvamos a su llegada a la Diputación. Pallardó se afilió al PP y, un año después, ya entraba en la ejecutiva provincial del partido, como secretaria de Comunicación. En 2007, se presentó en las listas municipales del PP en Burriana. Este hecho levantó ampollas en las bases del partido de la localidad, ya que Esther Pallardó es de la Vall d'Uxó. Se convirtió entonces en concejala y entró en la Diputación como responsable de Relaciones Institucionales y Comunicación.
Mientras su novio gobernaba (mal empleo aquí la forma pasada, por lo visto) en Castellón, ella adquiría poder y notoriedad. Logró colocar a sus afines y sacar de sus puestos a sus rivales. También en los nombramientos ha tenido un papel activo. Un caso muy comentado es el nombramiento de Marisol Linares, como secretaria provincial del PP. Este nombramiento provocó un enfrentamiento entre Carlos Fabra y Víctor Campos, hasta entonces muy buenos amigos.
Cuando Fabra dejó su cargo, sólo le pidió dos cosas a su sucesor para Pallardó: un despacho en el palacio provincial y el puesto de vicepresidenta. Javier Moliner sólo concedió lo primero. Pero la salida de Vicente Aparici le dio a Pallardó la oportunidad que esperaba.
En cuanto a su cuota de corrupción, requisito necesario para militar en el PP valenciano, Pallardó tampoco tiene su contador a cero (y nunca mejor traído). En 2008 se la acusó de inflar el kilometraje que cobraba a la Diputación. Supuestamente se desplazaba de Burriana a Castellón, ida y vuelta, cobrando 55 kilómetros. Sin embargo, la distancia entre ambas localidades es de algo más de catorce kilómetros (según la ruta que se tome, el camino se puede alargar hasta los dieciséis kilómetros). Según parece, también cargaba a las cuentas públicas otros recorridos extraoficiales. El PP vetó que se investigarán las cuentas y Pallardó rebajó el kilometraje en un 45%, pasando de cobrar 188,10 euros a cobrar 102,60 euros.