lunes, 7 de noviembre de 2011

Más mentiras en torno al accidente del metro

En 2006, Ferrocarrils de la Generalitat Valenciana (FGV), la empresa que gestiona el metro de Valencia, realizó una auditoría interna. Dicha auditoría fue realizada por una empresa externa, Enarila S A. La conclusión fue que FGV incumplía la normativa de Prevención de Riesgos Laborales y el sistema de gestión de prevención de estos riesgos no cumplía con los requisitos legislativos. Según el informe de la auditoría, las deficiencias más importantes eran que no existían planes de emergencia y, los pocos que existían sólo prevían incendios. En la Línea 1, la más antigua y la que más incidentes y accidentes registraba, no se realizó ningún simulacro. Tampoco se especificaba el nombre del personal designado en caso de emergencia ni se había comprobado si el personal había recibido formación para dichos casos de emergencia. Los accidentes ocurridos son investigados, en ocasiones, por el jefe de sección o por los propios trabajadores, pese a que deberían ser investigados por técnicos en prevención de riesgos laborales.
Este informe se realizó nueve meses después de un accidente entre tres convoys del metro en Picanya, con el resultado de 35 heridos (entre ellos, un maquinista que perdió parte de una pierna). Curiosamente, las conclusiones de este informe llegaban cuatro días antes del accidente del 3 de julio de 2006, en el que murieron 43 personas.
Sin embargo, este documento no se ha conocido hasta ahora. El documento ha sido ocultado durante más de cinco años por orden de Marisa Gracia, gerente de FGV. También son responsables de esta ocultación Dionisio García y José Antonio González Redondo, sucesivos responsables de Recursos Humanos. También son responsables políticos Francisco Camps, expresidente de la Generalitat y su sucesor Alberto Fabra, así como los sucesivos consellers de Infraestructuras: José Ramón García Antón (fallecido en 2009), Mario Flores e Isabel Bonig. Y que no se nos olviden los responsables de seguridad en el momento del accidente: Vicente Contreras (director de Explotación), Manuel Sansano (director de Operaciones) y Sebastián Argente (jefe de la Línea 1).

2 comentarios:

Isabel Barceló Chico dijo...

Ante tamaña irresponsabilidad ¿qué añadir? Me estremezco... y más aún al recordar lo que dicen las encuestras. ¿Será posible que todas las personas con sentido común que hay en este país - y son muchas - permitan que eso ocurra? Un abrazo, querido amigo.

Kurtz dijo...

Luego vendrán los lamentos y los lloros, pero será demasiado tarde.
Un abrazo.