Lo he dicho otras veces. La mejor forma de acabar con el aborto es educar. Educación sexual para los niños desde muy temprano, como se hace en otros países. Y dejar de tratar el sexo como un tabú.
Pero eso tampoco interesa. A los amantes de prohibir sólo es interesa prohibir. Y para ellos, educación sexual significa decir que la homosexualidad es una "disfunción", que la masturbación es un "vicio" o "defecto" que puede convertirse en una "adicción" que "hay que evitar", que el sexo debe estar orientado a la "procreación" y debe "practicarse por primera vez en el matrimonio", que los anticonceptivos deben ser "rechazados" porque "no evitan completamente el embarazo" y que el "el celibato o la vocación sexual de permanecer virgen res una opción que permite la felicidad y puede ser muy enriquecedora". Estos puntos pertenecen al programa sobre educación sexual que la Iglesia va a difundir en los colegios religiosos y en las parroquias valencianas. Resulta curioso que gente que no tienen ni idea de sexo traten de educar sobre él. ¿Tal vez eduquen también a los niños para decirles que la violación de niños es buena?
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