El presidente valenciano ha sido el primero en copiar el polémico contrato de integración propuesto por Rajoy en las pasadas elecciones. Una medida que será muy difícil que lleve a la práctica (la política de inmigración es cosa del Gobierno central) y que ya ha recibido las primeras críticas, no sólo de colectivos de inmigrantes, sino también de los obispos y de la presidenta de Madrid, Esperanza Aguirre (hasta en la política valenciana va a afectar el Congreso del PP). El conseller de Inmigración y Ciudadanía, Rafael Blasco ya ha advertido de que este contrato tendrán que cumplirse ("No firmar el compromiso de integración puede tener consecuencias con las autoridades") y ha pedido al Estado que le envíe inmigrantes con papeles y trabajo.
¿Qué es lo que propone este contrato de integración? Básicamente que los inmigrantes se "adapten" a las costumbres españolas y valencianas. Esto es una chorrada. Porque no hace falta ningún contrato de integración. Cumplen las leyes igual que nosotros.
Además, recientemente, se ha hecho un estudio que determina que los comunitarios residentes en nuestro país dan más problemas que los inmigrantes venidos de fuera. ¿Se les hará pasar por este contrato a lo ingleses, alemanes o franceses que vienen a pasar su jubilación a nuestras costas? No, porque esos son inmigrantes de primera clase. Pero los que vienen a trabajar son de segunda. No es lo mismo venir en cayuco o patera (o como se le llame mañana a ese tipo de embarcación) que venir en un avión.
¿Cuáles serán las costumbres que tendrán que cumplir? Supongo que hablar valenciano (si vamos a expedir billetes de valencianía, yo empezaría por los propios políticos, que suspenderían más de la mitad, por no decir todos); comer paella una vez a la semana, así como horchata con fartons; animar al Valencia y ser entusiasta de otros eventos deportivos (Copa América, Fórmula 1...); amputarse dedos al lanzar un petardo en Fallas (como dijo Pablo Motos en El hormiguero, es tradición valenciana no tener los diez dedos de las manos); participar en los moros y cristianos de Alcoi, tal y como hace en la foto Camps:
En fin, espero que los inmigrantes protesten, como lo hicieron contra el mismo modelo propuesto por Rajoy, ya que el resto de la sociedad valenciana permanece dormida.
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9 comentarios:
A mi lo que me pone realmente es "la noticia solidaria" que todos los fines de semana sacan en los telediarios de Canal9, No es por nada pero siempre salen los mismos... ¡que vergüenza! además que les mola más el royo africano que el sudamericano, ¡ves, si son racistas!
(modo irónico on)
¿Contrato? Auténtica basura, puag!!! No tengo coraje para opinar de esta indignante propuesta.
salud!
Casshern25: sí, en RTVV son muy solidarios. Capaces de retirar un gran y premiado programa como "Solidaris" (Punt Dos) por dar voz a los inmigrantes que vivían bajo el puente de Ademuz.
Wilde: un contrato basura en toda regla.
Salud.
mira, como acabas de decir tú en mi blog, intentaré ser educada...
Sin comentarios sobre los fascistas valencianos.
además de que a nivel económico el contrato burocratiza y dificulta aún más el proceso para la contratación legal es sobretodo una broma de mal gusto y una falta de respeto hacia las personas que vienen desde fuera, dejándolo todo para poder trabajar.
besos, Mar
Ad astra per aspera: tú, al menos, lo has sido (aunque me imagino lo que estás pensando).
Jovekovic: no callemos y hagamos todos los comentarios que sean necesarios.
Mar Marín: pero si éstos no tienen ni respeto por los valencianos autóctonos, ¿cómo lo van a tener por los que vienen de fuera?
Besos.
Tú mismo lo has dicho: ni vuestros políticos pasarían el control de "valencianía", ni muchísimos valencianos de toda la vida.
Igual que a mí no me gustan las sardanas, ni el vestido típico de mi tierra, ni els bunyols de quaresma.
Que lo digan claro: que no quieren más pobres llamando a sus puertas. Que lo que quieren son extranjeros con apellidos del tipo McLaren y demás...
¡Asco de gente!
Precisamente ellos son los que dicen defender mejor lo valenciano, pero no se nota.
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