Esta noche, hacia las tres de la madrugada, ETA ha vuelto a asesinar. Una furgoneta bomba (cargada con entre 100 y 300 kilos de explosivo) hacía explosión frente a la casa cuartel de la Guardia Civil en Legutiano (Álava). Un Guardia Civil, Juan Manuel Piñuel (melillense, casado y con un hijo) ha muerto y otros cuatro han resultado heridos.
Creo que la noticia no merece más comentarios, excepto los habituales de condolencia a los familiares y de rechazo y condena, y la reiterada llamada a la unidad de los que creemos en la democracia para derrotar esta lacra de la sociedad española.
Un día de dolor, y encima, llueve...
ResponderEliminarBesos
No sé que pretende ETA matando. Hoy querían provocar víctima como lo demuestra el hecho de que no avisaran de la colocación de la bomba como suelen hacer.
ResponderEliminar¿Qué consiguen con esto?
Besos.
Me uno al pesar de las familias y a la exigencia de que esa infame lacra que es ETA deje de matar.
ResponderEliminarBesos, querido amigo.
Pues yo no digo nada, esto seguirá ocurriendo y punto. No hay mucho que decir, los tópicos de los políticos de siempre, el rollito ese de unidad, la indignación general, bla bla bla
ResponderEliminarmatan, y seguirán haciéndolo. Matar es demasiado fácil.
salud,
Isabel romana: a ver si algún día los informativos abren con la noticia del abandono de las armas por parte de ETA.
ResponderEliminarBesos.
Wilde: por supuesto que seguirán matando. Pero eso no debe evitar que mostremos nuestra repulsa hacia ellos, aunque sea un tópico.
Salud.